Con 26 años como jinete y participaciones en México, Puerto Rico, Colombia, Perú, Rep. Dominicana, Uruguay, Ecuador, Argentina y los países de Centroamérica. Entrenador FEI (Federación Ecuestre Internacional) nivel 2, con 16 años de experiencia en el Club Castilla del Oro y eventos internacionales.
Por: Isaac Castillero Wilson
¡Pasión sin límites! Tarde soleada del mes abril, a la distancia un grupo de jinetes acatando las órdenes de su entrenador, a quien se le escucha decir «Max no te sientes fuerte, ve con el», mientras el joven salta con su caballo, siendo esta en esencia la rutina y el entorno para el participante e instructor de equitación, Heraclio Barletta.
Este panameño es declarado como un apasionado de la equitación, lo cual tiene mucho que ver con varios detalles, entre estos que su abuelo, quien lleva el mismo nombre, es pionero del desarrollo de la hípica en Panamá, que su padre -siendo veterinario- lo haya llevado a tener contacto con los animales y ver de pequeño la caballería armada de las fuerzas militares de la época pasar por su casa en San Francisco.
Sports & Health, interesado en conocer un poco más sobre la faceta de impulsador de esta figura de la equitación local, lo abordó en el Club Castilla del Oro.
¿Cuál es tu historia en la equitación?
Empecé en esta actividad cuando era un niño, al abrir la escuela de equitación en el área de la Ruinas de Panamá Viejo, desde entonces se empezó a promover este deporte con varias familias y empecé a participar. Hoy día soy el campeón nacional en la categoría abierta, entrenador en Castilla del Oro e incluso, los últimos años he estado en la parte administrativa.
¿Qué nivel de compromiso tienes con esta actividad?
Más allá de ser mi trabajo, mi responsabilidad es tal que he dejado algo relegado mi vida como jinete para dedicar mayor atención al desarrollo de las nuevas generaciones.
¿Qué significado te representa esta experiencia?
En lo personal, he logrado triunfos en competencias, pero el sentimiento nunca es igual a cuando es un alumno el que está en el podio, se me eriza la piel y hasta ganas de llorar provoca, pues es el resultado de mi trabajo en los demás.
¿Por qué trabajar con los más pequeños?
Sin duda que para mí es divertido. Aunque la tarea no es fácil, pues va más allá de las enseñanzas deportivas, ya que se tiene que desarrollar paciencia y otros atributos para guiarlos y formarlos para que sean ciudadanos de buen accionar.
¿Cuál es tu norte para con esta disciplina?
En nuestro club somos un semillero que busca hacer crecer esta disciplina y las demás actividades ecuestres. Solo con volumen podemos seguir contagiando a muchas más personas. Apelamos a fortalecernos en la parte deportiva y social para con los dirigidos, igual en el desarrollo humano (Colaboradores, veterinarios) y estructural con el mejoramiento de las instalaciones.
¿Cuál es el perfil de sus dirigidos?
Tengo alumnos desde los cuatro años hasta pasado los sesenta. Se dividen en los que practican de manera recreativa y competitivamente. Aunque la población más concurrida está entre los ocho y quince años.
Entre los aspectos metodológicos ¿Cuáles son primordiales?
Aparte de las rutinas de entrenamientos que conllevan la parte física y que vienen siendo más técnicas, está la parte mental, donde se trabaja mucho en los aspectos de compromiso, control, concentración y confianza del alumno. Se requiere de mucha psicología.
A nivel deportivo ¿Qué logros se han alcanzado?
Tenemos seis años consecutivos siendo campeones en la categoría pre-infantil (entre 8 y 12 años) a nivel nacional. El que dos de los cuatro integrantes del equipo de Panamá que ganó la medalla de plata en los pasados Juegos Centroamericanos hayan sido formados por nosotros es gratificante. La participación que tuvimos en los Juegos Olímpicos de la Juventud el año pasado en Singapur, con la alumna Alejandra Ortiz que se ubicó #21 a nivel mundial es motivo de inspiración.
De sus pupilos ¿Cuáles le han generado mayores emociones?
Todos son importantes. Max Gómez, Alejandra Ortiz, Nathalie Padrón, Juliana De La Guardia, Natalia García, Elizabeth Lakas, entre otros.
¿Por qué hay más mujeres que hombres?
A mi parecer, en nuestro país es visto como un deporte femenino, cosa que en otras naciones no es así. Además, aquí se practican tantos deportes que las opciones para varones son mucho más abiertas que para las chicas, las cuales suelen inscribirse en ballet, gimnasia o equitación.
¿Cómo vislumbra el futuro de Panamá en esta actividad?
Prometedor. Se está generando más competitividad a nivel deportivo entre los participantes y los diferentes clubes, lo cual es bueno si se hace de manera sana porque obliga a la superación continua, la cual beneficia al deporte en general.
¿Qué tal la frecuencia de competición este 2011?
De nuestra parte ha sido movida. En enero estuvimos en Guatemala, donde nos ubicamos en segundo lugar al igual que en el Encuentro de Fronteras, evento internacional realizado en Castilla del Oro. Después fuimos a Costa Rica, donde se hizo el podio en varias categorías. La segunda semana de este mes vamos a Guatemala, lo cual es bueno como fogueo porque son los mejores a nivel centroamericano.
Los objetivos venideros
Seguir cosechando títulos a nivel nacional y participando en competencias internacionales. Poner un sistema de iluminación en nuestro club para albergar competencias de mayor magnitud, al igual que ir preparando los nuevos prospectos que podrían competir en los Juegos Olímpicos de la Juventud 2014. Como meta estaría ganar el oro en los Juegos Centroamericanos de 2013, pues contamos con las participantes Gabriela Mizrachi, Victoria y Cristina Heurtematte.
Dato: Este apasionado de la equitación ha dirigido en diferentes ocasiones a selecciones panameñas de equitación en competencias internacionales.
Valor: Heraclio agradece a personas como Carlos Padron, Moíses Jaramillo, Karen Mayer, Celso Samaniego, entre otras que le han ayudado en su desarrollo.
Créditos Foto
Cortesía: Héctor Garrido