La Copa Atlas del Béisbol Mayor fue un festival de alegría, tuvo su toque de tristeza y melancolía, pero le sobro coraje y gallardía en una campaña donde Los Santos levantó su vaso y brindó como el campeón de campeones…
José Pineda – jopineda@medcom.com.pa
Cuando Abrahan Aguilar, el torpedero santeño, tiraba a la primera base, en ese camino de la pelota, la afición deliraba, el equipo santeño suspiraba y los narradores tomaban un trago de oxígeno para gritar con fuerza… «Los Santos campeón, Los Santos campeón, allí está el campeón».
El último out dejaba caer el telón y con él toda una temporada, en donde el béisbol retomaba su carácter de Majestad, donde el arbitraje quedó al desnudo por su desfachatez, donde Darién mostró signos de recuperación, donde Occidente se hunde en su mediocridad y en donde despedimos con honores, al más grande lanzador que se haya visto en la pelota nacional… Roberto «Flaco Bala» Hernández (q.e.p.d.).
Vamos al resumen de un año lleno de emociones, cargado de pasión y en donde el ganador fue el mismo béisbol que recibió el apoyo de la afición que no deja de vivir ese romance eterno con el deporte del panameño… «Su Majestad».
Los Santos Campeón…
El equipo de Los Santos consiguió su tercera corona en los últimos cuatro años. Quizás en la serie más pareja de los últimos 10 años, Los Santos ganaba a Bocas del Toro en siete partidos.
Fueron siete juegos de emoción y de gran competencia. Los Santos cae en casa en el primer juego, con un buen trabajo del derecho Luis Machuca por tablero de 3-2. En Changuinola, en un partido cardíaco, Los Santos gana 9 a 8, apoyado en dos batazos de cuadrangular de Abrahan Aguilar.
La serie se muda a la capital y los santeños golpeaban en los juegos tres (2-1 ) y cuatro (6-2), mientras que Bocas golpeaba en el quinto (5-0) y sexto (4-3). Al final, el bate de Edgar Lara, David Gutiérrez y Abraham Aguilar, respaldaban la labor del dominicano Ricardo Gómez y Los Santos se llevaba su séptima corona de la pelota mayor.
La Serie Final se fue con el sinsabor de la expulsión del derecho Alberto «Rocambo» Acosta», con la majestuosa labor de Luis Machuca en la lomita en el quinto juego, con el «bombazo» de Aldolfo «Capirita» Rivera en el sexto partido, con el brazo biónico del colombiano Javier Ortiz y con los más de 50 mil aficionados que fueron a los siete juegos, dejando una taquilla récord de 196.530.00 balboas.
Pitcheo extranjero dominante…
Entre las cosas buenas de la Copa Atlas, está la presencia de los lanzadores extranjeros que nuevamente pusieron su cuota de calidad en el campeonato. El zurdo Carlos Álvarez, de Venezuela, tuvo marca de 11 victorias y 1 derrota con Panamá Oeste y contribuyó para que los «Vaqueros» treparan hasta la serie de cuatro y tener una temporada de ensueño.
Javier Ortiz, de Colombia, y Ricardo Gómez, de Los Santos, fueron piezas fundamentales en el pitcheo de Los Santos, en toda la temporada. Ricardo Ortiz tuvo foja de 11-1 sumando toda la serie, con un impresionante 5-0 en la ronda de cuatro. Gómez puso marca de 2-2 en todo el año, pero su brazo fue inspirador.
Otros que destacaron, el zurdo dominicano José Fragoso de Darién puso récord de 2-4 y su efectividad de 3.89 fue de las mejores con su equipo en el 2011.
Occidente no vio una…
Una nota de tristeza y de bajo rendimiento fue el trabajo de Chiriquí Occidente, que se marchó del campeonato con marca de cero victoria y 20 derrotas, una foja desastrosa para su historial. Sus bateadores sólo sonaron para un ridículo .196 de promedio y sus lanzadores se fueron con una mediocre efectividad colectiva de 6.29.
Se fueron en tinieblas, el trabajo bueno que han venido haciendo en categorías menores es el único aliciente para un futuro confuso y poco alentador de esta provincia.
Darién con 15-5…
Con una nueva dirección, comandada por Claudino Hernández, Darién terminó con marca de 15 derrotas y 5 victorias, una marca que indica el optimismo de una provincia que trata de salir de los últimos planos del torneo nacional.
El buen trabajo del cuerpo técnico, el empeño de la dirigencia y el amor de los peloteros, hicieron de Darién un protagonista que por primera vez en su historia jugó todos sus partidos de local en el estadio de Metetí.
Oeste sorprendente…
Uno de los equipos que más sorprendió a los expertos fue el de Panamá Oeste.
Luis Muñoz se llevó el premio al Manager del Año y acabó peleando un cupo a la serie final en un partido extra ante Bocas del Toro. En total, sumaron 24 victorias y 20 derrotas, sin contar el compromiso extra por el último cupo a la Serie Final.
La sangre joven, la mezcla de veteranía y la buena preparación física fueron claves en el buen año de los «Vaqueros».
Herrera quedó fuera…
Uno que se fue con mucha pena y poca gloria fue la tropa herrerana, dirigida por el cubano René Bello. Los herreranos fueron eliminados en la ronda regular, tras presentar una pobre foja de 9 victorias y 11 derrotas, ubicados en el octavo escalón de la general de posiciones.
Herrera se fue temprano y su afición lloró su partida.
«Flaco Bala» y su partida…
El líder de victorias de todos los tiempos en la pelota panameña y dueño de la marca de más victorias de manera corrida (24) se nos adelantó en el viaje al más allá. Roberto «Flaco Bala» Hernández dejó de existir el 1 de abril en Houston, Texas.
«Flaco Bala», el mejor de todos por su gran calidad en el terreno de juego, muere a causa de un cáncer en el esófago que nunca se le pudo controlar.
Asistencia y taquilla 2011…
El año no pintaba bueno, la asistencia sufrió un duro golpe en la serie de seis equipos y de cuatro, estuvo regular en el inicio y acabó con mucha fuerza en la serie final por el campeonato.
Un total de 176 mil 973 aficionados se reportaron a los estadios, dejando una taquilla de 589 mil, 413 con 00 balboas.
La serie regular tuvo 80 mil aficionados, una baja cantidad, tomando en cuenta el mal juego de equipos taquilleros como Herrera y Veraguas. A todo esto, se suma la pobre asistencia y poco respaldo de la afición de Panamá Oeste en todas sus series.
Galardones y distinciones…
El pelotero Charly Apu, quien participó con la novena de Darién, fue escogido como el Novato del Año, siendo la primera vez en la rica historia del béisbol panameño, que un jugador de ese equipo gana esta distinción. Apu -de 18 años- jugó como receptor.
Carlos Álvarez ganó por partida doble, se llevó el premio al Jugador Más Valioso del torneo y además, se llevó el premio al mejor lanzador, ganando el trofeo «Roberto Hernández».
Otras cositas…
_ Llegaron dos árbitros extranjeros a participar en el torneo nacional mayor, Rodríguez Curet y Arnaldo Román.
_ Se jugaron partidos en San Félix, Chiriquí; en Penonomé, en Chame y en Metetí, Darién.
_ La afición chiricana ha dejado de respaldar a su equipo.
_ Bocas ha crecido y su equipo tiene dos finales consecutivas.
_ Coclé hizo un buen trabajo y dio pelea. Sus técnicos Olmedo Sáenz y Miguel Ibarra dieron un buen trabajo.
_ Veraguas quedó con un saldo pendiente con su afición, el 2011 fue para el olvido.
_ Herrera tiene que reponerse, entrenar duro y mostrar una renovación en el equipo.
_ Metro pelea, pero le falta un poco más de apoyo. José Macías jugó con los metropolitanos.
_ Ángel Chávez fue un pilar en Chiriquí, pero se cayó en la recta final del torneo.
_ Colón tiene esperanza y fe… la nueva dirigencia tiene ganas de competir.
_ El arbitraje nacional fue regular, inclusive un perro orinó a Abdiel Vinda en Coclé.
_ Primer torneo de la nueva junta de Fedebéis… aprobado y con buena nota.
¡Viva el Béisbol!