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| Stephen Hendry de Escocia durante un partido de semifinal en el abierto de China 2005 contra su compatriota Alan McManus en el Estadio de Haidian en Beijing. Hendry venció McManus 6-4. (Foto AP / Xinhua, Bi Mingming) |
Se juega en una mesa cubierta con fieltro, 6 bolsillos, un palo de billar y 21 bolas.
Por: David Alejandro Chacón
@DavidChacon31
Fotos: Dreamstime
El snooker, que data de 1875 (India), es al igual que el billar un juego con troneras y que generalmente se desarrolla de manera individual. Cuenta con un total de 21 bolas, 15 rojas y el resto entre amarillas, verdes, marrones, azules, rosadas y negras, más una blanca que utilizan los jugadores para golpear el resto. Su mayor aceptación está en Europa, sin embargo en América, también es practicado pero en menor grado.
¿En qué se diferencia del billar?
Primero, en la mesa. En snooker es mucho más grande (12 pies vs 8 pies), las troneras son todas del mismo tamaño, más pequeñas que en el billar y terminan con una curva, lo que hace más complejo el juego, que al final gana el que sume más puntos al terminar un frame o partida.
Por lo regular, un juego de snooker se disputa a un número impar de mesas. Por ejemplo, la final del Campeonato Mundial se juega a 35 mesas, mientras que en torneos cortos a nivel profesional se puede decidir en siete frames. Se acostumbra a jugar de manera individual, pero el reglamento no es cerrado del todo, pues acepta modalidades de parejas. No es lo común, pero sí ha pasado.
FIGURAS
Entre los grandes jugadores de este deporte están Mark Selby, de Inglaterra, quien lidera el Ranking Mundial 2015, el también inglés Stuart Bingham, ganador del último Campeonato Mundial, el histórico Ronnie O ‘Sullivan, apodado “El Cohete” por su rápido y particular estilo de juego que lo llevó a sembrar varios records y Stephen Hendry, de Escocia, considerado por muchos como el “mejor de la historia”.
El snooker, además, es un deporte económicamente atractivo y deja inscribir a cualquier participante, incluso si no está en el circuito, aunque pasa poco. La importante base de datos Cuetracker nos permite echar un vistazo de lo que son las ganancias individuales, sin contar patrocinios. Mark Selby, por ejemplo, ganó la temporada pasada poco más de 1 millón de dólares, a razón de 83 mil dólares mensuales. Nada mal, ¿no?
Stephen Hendry, por su lado, ganó siete títulos mundiales, cinco UK Championship y seis Masters, lo que valió para sumar la que es conocida como la mayor suma en la historia en esta modalidad del billar, 5.7 millones de dólares. Hendry, ya con una gran historia, decidió decir adiós en 2012.
LADO OSCURO
Lamentablemente no todo ha sido positivo en la historia del snooker. Varias de sus leyendas se han visto envueltas en escándalos de drogas y problemas domésticos. Ronnie O ‘Sullivan fue acusado varias veces de portar sustancias estupefacientes y su padre, por asesinato, fue condenado a cadena perpetua.
El irlandés Alex Higgins, ya fallecido en 2010, confesó varias veces su adicción a la cocaína y marihuana. También Jimmy White reconoció ser adicto al crack y cocaína, problema que según él le costó “10 títulos mundiales”. Por último, John Higgins fue acusado en 2010 de “amaño de partidos”.
LO QUE VIENE
Para cerrar 2015 ya están confirmados del 9 al 21 de noviembre el Campeonato del Mundo en Egipto, masculino y femenino, mientras que del 24 de noviembre al 6 de diciembre se celebrará en Inglaterra el UK Championship.
En ambas competencias dirá presente lo más granado del snooker mundial y servirá como abreboca para lo que viene en la temporada 2016 comenzando con el Master en Gran Bretaña desde el 10 de enero.
¿Cómo se juega?
Básicamente es tirarle a las bolas rojas. Si se mete una roja de primero, sigue una de otro color y si metes la de color, sigue una roja y así sucesivamente hasta que se acaben.
Una vez se acaben las rojas, se va jugando con las bolas de menor a mayor, comenzando con la amarilla que vale un punto hasta la negra que vale siete. Al final el que tenga más puntos gana la mesa. Los jugadores pierden su turno cuando no embocan una bola o por faltas.
