Muy lejos estaba Ortega de imaginar que en pocas horas su alegría se vería disminuida y la legitimidad de su campeonato seriamente cuestionada por factores ajenos a su responsabilidad.
Por: Héctor Villareal
Foto: wbcboxing
Fue una batalla muy digna y diez veces más emocionante que la multimillonaria revancha entre Mayweather y Maidana. Dos primos, vecinos, compañeros de entrenamientos y muy buenos amigos, los chorreranos Carlos “La Arañita” Ortega y Leroy “El Sensacional” Estrada combatieron con furia, intensidad y muy alto nivel técnico.
“De no haber sido primos, se matan”, exclamaban algunos. “Muy pocas veces se ven peleas como ésta”, opinaban otros de los que presenciaron el sábado 23 de agosto en la Arena Roberto Durán, el combate en el que, según se había anunciado, se definiría el Campeón Mundial número 30 de la historia de Panamá, entre los finalistas de un torneo cuadrangular del peso mínimo en el que participaron 4 púgiles locales.
Durante los asaltos finales, la mayoría de los presentes coincidía en que cualquiera de los dos merecía la victoria por estrecha diferencia. Al final, los jueces dictaminaron el triunfo por decisión unánime de Carlos Ortega, quien celebraba el logro más importante de su vida mientras le colocaban el cinturón verde del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) en cuya hebilla plateada se leía la frase “World Champion”.
ABUNDANCIA DE CAMPEONATOS “MUNADIALES”
Muchas han sido las críticas que han recibido en años recientes las principales entidades que rigen el boxeo mundial por la tendencia a reconocer en cada una de ellas a más de un monarca por categoría de peso.
La Asociación Mundial de Boxeo (AMB) los denomina “interinos” y hace dos años intentó eliminarlos ante los constantes señalamientos de que el interinato debe obedecer a la imposibilidad del legítimo campeón de defender su cinturón ya sea por problemas legales, de salud o lesiones.
Muchos promotores se opusieron a la eliminación de estos títulos alegando que eran necesarios para incrementar la actividad y las oportunidades para los púgiles clasificados. La entidad optó por mantenerlos pero les retiró la condición de campeones y los agregó a la lista de clasificados mundiales.
El Consejo Mundial de Boxeo nunca ha aceptado reconocer títulos interinos y recurrió a la estrategia de llamarlos “Campeones Plata”, variando el color de la hebilla de dorada a plateada. Estos cinturones de “World Silver Champion” se han comercializado sin dificultad por todo el mundo y debió haber sido igual en Panamá, de no ser porque en este país ganar un campeonato del mundo de un deporte implica el otorgamiento de una pensión vitalicia de quinientos dólares ($/. 500) que en el caso de un atleta joven como Ortega, con altas expectativas de vida, debió representar un ingreso de más de trescientos mil balboas (B/. 300,000) durante los próximos 50 años.
AUTORIDADES DEL BOXEO NO ACLARARON
La polémica por el reconocimiento o no del ganador del pleito Ortega vs Estrada como Campeón Mundial invadió los medios de comunicación desde semanas antes de realizarse el mismo. La confusión no pudo ser aclarada ni con la presencia en Panamá del Presidente del CMB, Mauricio Sulaimán, que no mantuvo una posición clara ni en sus declaraciones a los medios istmeños, ni en la carta que días después envió al director General de Pandeportes, Roberto Arango, quien tuvo que atender personalmente este caso ante la falta de autoridad de los miembros de la Comisión de Boxeo de Panamá que no se atrevieron a emitir un fallo que no fuera del agrado del organismo mundial para no arriesgar sus intereses personales.
“Yo respeto mucho al señor Rogelio Espiño, un hombre que ha hecho mucho por el boxeo en Panamá, eso no lo puede negar nadie. Sin embargo no compartimos su idea de que reconozcamos como Campeón Regular a Ortega”, declaró el titular de Pandeportes tras emitir la nota en que 17 días después del pleito le negaba el reconocimiento. “Sí aceptamos que es el Campeón Plata, sí aceptamos que lo ha hecho con mucho sacrificio. Nosotros apoyamos a ‘La Arañita’, pero hicimos consultas a muchísima gente conocedora del boxeo en Panamá e internacionalmente, y la verdad es que la gran mayoría considera que no llega a ser un campeón regular”, agregó.
ASPECTOS EN CONTRA
Entre los argumentos expresados por aquellos que se oponían al reconocimiento de Carlos Ortega destaca el hecho de que un campeón surgido de un torneo en el que sólo participaron cuatro panameños debe ser considerado un Campeón Nacional y no mundial. Sus récords tampoco impresionan a nadie. Estrada había ganado apenas 12 de sus 14 peleas a nivel profesional y Ortega sólo diez de quince. “El Sensacional” nunca ha peleado fuera del país y “La Arañita” solo ha vencido a panameños.
La cuenta oficial del CMB en la red social “Twitter” publicó cuatro días antes del fallo emitido por Arango que el cinturón plata “seguirá diciendo WORLD en lo que se cambia la hebilla del cinturón” explicando que eso se estableció meses atrás en reunión entre tres de los organismos mundiales. Lo anterior no concuerda con el texto de la nota enviada por Sulaimán a Arango, evidenciando que el discurso del CMB para Panamá es uno y para el resto del mundo es otro muy distinto.
Las clasificaciones mundiales del mes siguiente ubican al panameño Carlos Ortega como segundo clasificado en la lista de aspirantes al campeonato del peso mínimo que ostenta Osvaldo Novoa, reforzando con ello la tesis de que no es Campeón Mundial.
PUNTOS A FAVOR DE “ARAÑITA”
Tanto Carlos Ortega como Leroy Estrada tienen la calidad para vencer a cualquier oponente de su peso y los expertos aseguran que ambos tienen nivel para ser monarcas universales. La pelea que realizaron estuvo lejos de ser un asunto de familia y ambos se comportaron como dignos aspirantes a un título mundial.
El representante del CMB en Panamá, el abogado Alberto Guerra, estuvo presente en todas las conferencias de prensa, ceremonias de pesaje y eventos relacionados con las dos carteleras en que se disputó el torneo y en los que se mencionó con insistencia que el ganador se convertiría en el Campeón Mundial #30 de Panamá. Guerra nunca desmintió al promotor, al anunciador del ring ni a nadie que expresara lo anterior. Tampoco lo hizo Sulaimán ni antes ni después del combate.
El promotor de la cartelera, Rogelio Espiño, asegura que además de las sanciones del título que tuvo que pagar al CMB, la Comisión de Boxeo de Panamá le cobró la tarifa correspondiente a las carteleras que incluyen peleas de Campeonato Mundial. “Esto indica que la Comisión de Boxeo, al establecer la tarifa a pagar para un evento ha tenido que definir si el mismo disputa un título mundial o no” expresó Espiño en un comunicado en el que asegura que tomará acciones legales en respaldo de Ortega.
QUE SEA PARA BIEN
En entrevistas posteriores al fallo de Pandeportes, Carlos Ortega se ha mostrado respetuoso y resignado a que no recibirá pensión vitalicia por ahora, pero confiado en que logrará confirmar su calidad de Campeón. “Solo Dios sabe como son las cosas y lo que me queda es seguir trabajando fuerte” declaró el púgil de 25 años.
Si de algo podemos estar seguros es de que “Arañita” Ortega no se hubiera dado semejante golpiza durante doce intensos asaltos con su propio primo si hubiera sabido que lo que estaba en disputa era la casilla número dos de las clasificaciones. Aún resultando ambos ganadores de las eliminatorias, estuvieron a punto de no enfrentarse y el único argumento que logró convencerlos fue el de la pensión vitalicia de $/. 500 mensuales.
Tanto Espiño como Ortega fueron engañados, sorprendidos en su buena fe y tal vez estafados. Ellos han tenido que pagar un alto precio en un hecho que lo único que pudiera tener de positivo sería que con él se contribuyera a eliminar del diccionario del boxeo los campeonatos plata, interinos, eméritos o de cualquier otra denominación tendiente a reconocer a más de un titular por entidad en cada categoría de peso.