Por: Gustavo Ampudia P.

El boxeo, es uno de los deportes más emocionantes del planeta.

Rodeado de glamour, dinero, fama y un sacrificio que sólo aguantan los valientes, este deporte crea ídolos que paralizan países. En Panamá, por ejemplo, Roberto ‘Manos de Piedra’ Durán se convirtió en una leyenda viviente. Sus grandes triunfos sobre el cuadrilátero hicieron vibrar a cientos de panameños que aplaudían sus victorias y lamentaban sus derrotas.

Como Durán, el pugilismo vio nacer figuras en otros países como: Muhamad Alí, Sugar Ray Robinson, Rocky Marciano y más reciente Mike Tyson, Floyd Mayweather Jr. y Manny Pacquiao, para mencionar algunos.

Ahora, nuevos boxeadores buscan brillar en la constelación de estrellas que tienen como marco el pugilismo profesional. Dieron sus primeros pasos en el boxeo olímpico y ahora buscan incursionar con fuerzas en el profesionalismo.

El francés Tony Yoka (rojo) pelea contra el filipino Filip Hrgovic en las semifinales de 91 kg en los Juegos Olímpicos de verano 2016 en Río de Janeiro, Brasil. (Foto AP / Frank Franklin II)

Uno de ellos es el boxeador francés de origen congoleño Tony Yoka. Yoka, quien milita en la categoría de los pesos pesados, tiene una marca perfecta en el profesionalismo con cinco victorias, cuatro ganadas antes del límite pactado.

Como boxeador olímpico escribió su nombre con letras doradas en los Juegos Olímpicos de 2016 y también se bañó de oro en el Campeonato Mundial de Boxeo (AIBA) en 2015. Y aunque está comenzando, ya se atrevió decir abiertamente que el monarca mundial del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Deontay Wilder no es tan bueno como parece, solo que tiene una buena pegada.

Otro que está abriéndose paso en el profesionalismo es el estadounidense Shakur Stevenson. Subió al profesionalismo en 2017, logrando cosechar un récord con nueve triunfos, cinco de ellos por nocaut y cuatro por decisión.

Su velocidad de manos y rápidos movimientos de piernas son sus principales armas. Su paso por el boxeo aficionado, como antes se le llamaba, fue imponente, luego de ganar la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Río 2016, y Oro en los Juegos Juveniles de Nanjing 2014 y los Mundiales de Sofía, de ese mismo año.

A sus 21 años se ha convertido en una de las promesas de Estados Unidos, firmando un contrato con la empresa Top Rank. Lleva su carrera en la categoría pluma.

Errol Spence Jr. (izq.) y Lamont Peterson durante la quinta ronda del campeonato de peso welter de la FIB. Enero 2018. Nueva York. (Foto AP / Frank Franklin II)

Para hablar de logros en una corta carrera el nombre de Errol Spence brilla con luz propia. Spence, de 28 años de edad, participó en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, logrando ubicarse entre los mejores.

Decidió dar el salto a pugilismo profesional y se mantiene invicto en 24 peleas, 21 ganadas por la ruta rápida. Su velocidad, potencia en la pegada y rápida reacción ante el ataque del rival, son las características que hacen brillar al joven boxeador. Es el actual campeón de peso welter de la Federación Internacional de Boxeo.

La rama femenina no escapa del talento y ansias de triunfo de una nueva camada de boxeadores. Heaven García, con marca aficionada de 58 victorias y 7 derrotas, es un ejemplo de determinación. A sus 18 años ha sido campeona mundial en la división de las 112 libras. Ha sido campeona continental y dos veces monarca olímpica Jr. Y aunque todavía no da su salto al profesionalismo, muy pronto se escuchará ese nombre en los grandes escenarios del mundo.