¡Pesadilla en la calle 13!
Por: José Pineda
Fotos: José Pineda
Cuando se inventó el sistema de dos grupos, aislando a los equipos y huyendo a enfrentamientos naturales entre novenas tradicionales, la efervecencia desmaya y la pelota vive una crónica de espantos y suplicios…
La temporada 2013 estuvo enmarcada en una pesadilla, algo así como un capítulo de espanto, donde el drama, el terror, el suspenso y la tragedia, superan los mejores films del maestro del género, el impredecible Alfred Hittchock.
No es para recordar, mucho menos para olvidar. Igual que aquella famosa película, “Pesadilla en la Calle 13”, nosotros en el béisbol, tenemos nuestra hora de espantos, en el año 2013, el cual será recordado por la ausencia de aficionados, el sistema errado de competencia y la poca eficacia de una dirigencia al momento de tomar decisiones.
Vamos al grano, veamos en resumen, lo bueno, lo malo y lo feo, de un drama que ha manchado la campaña:
Lo Malo:
– Sistema de dos grupos, un atentado contra el béisbol. Este año se decide jugar dividiendo el torneo en dos bloques, haciendo partidos sólo de grupos, sin chocar o enfrentar con los del grupo contrario. Se satura a la afición con los mismos partidos, se evitan choques tradicionales y colapsa el entusiasmo por la pelota criolla.
– En 69 años seguidos, exceptuando sólo el primer campeonato, el duelo entre Herrera y Los Santos siempre ha sido una atracción nacional y una rivalidad eterna. Por el concepto de calendario que se implantó se corta la tradición y no tenemos ese Clásico de Clásicos.
– El torneo juvenil supera en taquilla y en asistencia al torneo mayor, algo que simplemente no se debe dar, conociendo que el campeonato de mayores, por tradición ha sido el mejor en 70 años de historia.
– Peloteros con quejas interminables de no pagos a sus servicios, saldos pendientes y dirigentes que aseguran pagar y que los jugadores no controlan y mal utilizan sus ingresos en noches de casinos y demás.
Lo Feo:
– El estadio de Colón, en condiciones deplorables. Un terreno de juegos que da pena, totalmente quemado por la ausencia de agua, pobre iluminación y los aficionados con problemas para sentarse. Se ha invertido una gran cantidad de dinero en el Roberto Mariano Bula y no se ven avances o mejoras. Colón como equipo de tradición merece mejor atención y un mejor estadio.
– Estadios sin tableros electrónicos, incluye el bello terreno del José Antonio Remón Cantera, que tiene todo el año sin tablero electrónico y el Olmedo Solé de Las Tablas en las mismas situaciones. A manera de parábola, el presidente de la Liga Santeña de Béisbol HD Tito Afú, regala un tablero electrónico a Bocas del Toro y en su patio, no funciona el que tiene que utilizar su afición.
Más cosas feas:
– Página internet de pobre presentación, cero interacción con los aficionados, mueren cuentas de twetter y facebook en una era, donde las redes sociales mueven el mundo.
– Falta de autoridad y de mando en la Federación Panameña de Béisbol.
– Pantalla gigante del Rod Carew, otro año sin funcionar, ya la afición se ha olvidado que existe.
– Renuncia de Alfonso Urquiola en el equipo de Los Santos, luego su reintegro y la guerra invisible entre peloteros, dirigencia y cuerpo técnico que afectó el rendimiento y que al final quedaron eliminados.
– Pensar que el torneo mayor debe desaparecer y la idea desdibujada del presidente de Fedebeis de fusionar nuestro torneo nacional con el Probeis. Simplemente una locura inpensable.
Lo bueno…
– Poco, pero siempre hay cosas positivas en una temporada para el olvido.
– Apertura del Kenny Serracín, esperada por muchos, pero una noche mágica, donde el béisbol retoma fuerzas, se respira ambiente de tradición y se enciende la llama de alegría y fiesta. Cómo dijo el comentarista deportivo David Salayandía, “lo mejor que le pudo pasar a la temporada mayor, fue la apertura del Kenny y que Chiriquí ganara ese día ante su gente”.
– Coclé con un equipo joven hace un buen trabajo y su estadio el José Antonio Remón Cantera sigue siendo el mejor terreno de jugar pelota en todo el país.
– Nos vamos, nos quedamos con el torneo juvenil, mejor en su totalidad, en el 2013 y un certamen mayor para el olvido.
¡Viva el Béisbol!