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| Foto: Dreamstime |
Cuando llega el verano, la fiebre da una tremenda calentura y la emoción del béisbol trepa por las venas, hasta conseguir su más alto nivel.
Por: José Pineda
Fotos cortesía de: José Pineda
Llega el verano al Planeta Béisbol, y con él todo un mundo de emociones que sólo su Majestad puede brindar.
En éste 2015, el béisbol entra con pasos de precaución, la Junta Directiva de la Federación Panameña de Béisbol apenas entrando en calor, tras los atrasos para escoger los nuevos dirigentes de éste deporte en Panamá.
Aun así, entre “Chivo y Conejo”, la pelota llega, para quedarse y para hacer del verano el mundo mágico de una afición que siempre ha dado su apoyo irrevocable a este deporte.
Vamos al Mundo Béisbol, y hablemos de lo que viene en la pelota juvenil:
Mirada a los estadios
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| Luis González, manager de Coclé |
Ese planeta béisbol se alista y nosotros también nos preparamos, por ello hemos dado una vuelta por los estadios y con satisfacción hemos visto el avance en cada uno de ellos en el interior del país y el gran desarrollo de los equipos que con limitaciones se entrenaron para el torneo nacional juvenil.
Estuvimos en Changuinola y allá el trabajo no para; lo mismo Colón, con su nuevo montículo y la instalación de su pomposo tablero electrónico; en Veraguas se hizo un maravilloso trabajo, lo mismo en Herrera, Los Santos y en todo Chiriquí.
La pelota ya llegó, su majestad viene con toda la emoción de siempre, después de una larga espera, podemos gritar con mucha fuerza: ¡Ya viene el béisbol!
¡Herrera y sus 40 plagas!
Cuando el equipo juvenil de Herrera ganó por última vez un torneo nacional de béisbol juvenil (1974), el pasaje de las chivas en la ruta Chitré-Panamá era de $3.25 y los pasajeros eran recogidos y dejados en sus hogares.
No existía la circunvalación y en las panaderías de La Arena vendían 50 rosquitas de pan por un dólar. Los tiempos han cambiado, en aquel entonces Herrera ganó en su desaparecido estadio ‘Rico’ Cedeño bajo la tutela de Héctor ‘Lasy’ De León.
‘40 años son suficientes’ pudiera ser el título de esta triste novela, para una provincia que ama, vive y disfruta como nadie el béisbol.
“Tenemos un buen equipo, vamos por el campeonato, esperamos que este grupo de atletas, grupo de muchachos, pueda conseguir tan anhelado título que no hemos ganado”, dijo Israel Delgado, mánager cubano al frente de la tropa herrerana.
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| Israel Delgado – Herrera |
Herrera ganó los torneos nacionales de 1971, 1973 y 1974 de manera corrida y desde hace 40 veranos no ha vuelto a subir a lo más alto del podio.
Cuartos de mi gente
Cuando el sol salga, saldrá con fuerza, el brillo de una luz interior apenas se asoma, en el béisbol y en el deporte no hay nada más poderoso que la actitud y si hay un equipo con esa característica es Bocas del Toro.
Concentrados bajo fuertes limitaciones, en un gimnasio “donde no entra el sol, porque el sol es aristocrático”, entrenó el equipo de Bocas del Toro, bajo las órdenes del cubano Rigoberto Blanco.
“Mira, nosotros tenemos actitud, al mal tiempo buena cara, hemos estado trabajando con muchas limitantes, tenemos que hacer ejercicios en el gimnasio, pero te voy a decir algo, aquí sobra ganas, coraje y este año vamos a pelear para meternos entre los cuatro mejores equipos del campeonato”, dijo Blanco.
Como decía el ‘Poeta de la Pobreza’, Demetrio Herrera Sevillano: ‘Cuartos donde no entra el sol…’, con entrenamientos en penumbras, pero con la fe de que algún día ‘el sol sale para todos’.
Bocas viene con una tropa que puede sorprender, nadie ha dicho miedo, todos tienen material para pelear cada partido. Bocas, que no gana desde 1964, llega a los 51 años de no ver la luz de ese sol que ilumina a los ganadores.
La Leña Roja de Coclé
Cuando la ‘Leña Roja’ salte al terreno, no faltará quién grite: ‘agua que me quemó’.
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| Tropa Coclesana |
El equipo juvenil coclesano, que no gana un torneo nacional juvenil desde 1962, está que arde, pero del calor que consume el cuerpo de un equipo que pide a gritos ganar un campeonato nacional de pelota juvenil.
Fue, en 1962, cuando se coronaron campeones, en el primer torneo de la historia; de allí en adelante, han pasado 52 años sin ganar, algo así como medio siglo, cinco décadas o unas bodas de oro.
Ahora, el mánager Luis González cree que pueden hacer la diferencia y pelear por una corona, aunque los pronósticos no sean favorables. ‘Hemos visto buena defensa y pitcheo, pero tenemos que hacer énfasis a la hora del bateo, ya que hemos tenido fallas’, dijo el mánager de la tropa coclesana.
Metro es Metro
No se puede hablar de la pelota juvenil sin mencionar al campeón: “Metro es Metro” señores y a pesar que el “tricampeón” no viene con el manager José Murillo III, el equipo sigue siendo tan peligroso como siempre.
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| Equipo de Bocas del Toro |
La hueste metropolitana en base a habilidad en las bases, bateo de contacto y una escuela de muchos años, tiene todo para estar entre los tres mejores del campeonato. La astucia de su ex manager José Murillo será un elemento importante que éste año no tendrán, pero el equipo sigue siendo el mismo en actitud.
Metro es Metro señores, y ojo que “allí, allí viene el campeón”.
Otros equipos:
Chiriquí suena y truena con un tremendo staff de lanzadores. Ha ese elemento diferenciador debemos agregar que vuelve el manager Enrique “Kiko” Serracín, un viejo lobo que ya tiene una corona en esta categoría.
Kenny Hernández y Stephen Fuentes son dos de los lanzadores más consistentes del béisbol juvenil y pondrán a Chiriquí en los primeros planos.
De Panamá Oeste no se puede hablar mucho, es un equipo que puede sorprender, pues en esta categoría siempre ha hecho un buen trabajo. Regresa el manager Jorge “Pini” Cortez con el equipo.
De Los Santos, allí hay muchas dudas, elementos humanos sobran, cuerpo técnico algo confuso con cambios que se dieron durante los entrenamientos. No se sabe si hay química y dependen de la cohesión que lleven.
De Colón se puede pensar que habrá mejores días y que puede pelear, en Darién y Occidente no hay mucho brillo, pero todo listo para comenzar la batalla.
Bienvenido el verano.
¡Bienvenido Majestad!
¡Viva el Béisbol!
