Con Venezuela ganó dos suramericanos y participó en tres mundiales; desde noviembre 2019 asumió las riendas de “La Sele” femenina
Por: David Alejandro Chacón
Fotos: David Alejandro Chacón
Zseremeta es un tipo sencillo. Le gusta conversar de fútbol. El estratega panameño asumió, las riendas de la Selección de Fútbol Femenino de Panamá por primera vez en su carrera.
Todavía extraña el Pabellón, plato típico de Venezuela, país donde estuvo al mando de la selección femenina por ocho años, ganando dos campeonatos suramericanos (Sub 17) y participando en tres Mundiales Sub 17.
“En Venezuela hice un postgrado futbolístico y ahora vengo a trabajar por mi país. Soñaba con este regreso, con dirigir la selección”, dijo el técnico canalero a Sports & Health Panamá justo antes de comenzar un entrenamiento en el estadio Luis Ernesto “Cascarita” Tapia de la Ciudad Deportiva Irving Saladino.
Cuando se presentó la oportunidad de dirigir el banquillo de “La Sele” femenina, no lo pensó dos veces, dicen que el buen hijo siempre regresa a casa. “Allá en Venezuela tengo mi residencia y, de hecho, se lo dejé claro a la federación. No obstante, esta oportunidad no la podía desaprovechar”, resaltó.
¡A trabajar!
El contrato de Zseremeta expira en 2023. La responsabilidad es grande, pero los retos forman parte de la carrera de este director técnico, que después de su pasantía en Venezuela, dirigió las riendas de la selección femenina de República Dominicana durante un año.
“La idea de venir a Panamá es trabajar en un desarrollo completo; no es solo pararme en la línea y decirle a las jugadoras ‘corran, marquen, defiendan’. El propósito es sembrar una semilla como lo hice en Venezuela y crear respeto en todo el sentido de la palabra”, explicó el entrenador.
Al momento de la entrevista, Zseremeta, quien comenzó a ver jugadoras en convocatorias libres, apenas tenía 15 días al mando de la selección.
Ya se había reunido con la dirección de selecciones y con la secretaría general de la Federación Panameña de Fútbol. Las reuniones, en resumen, fueron fructíferas.

“Les planteé mi idea futbolística, organizativa y estructural. Lo primero que hice fue darle respeto y su respectivo puesto a los ciclos anteriores. No se trata de desacreditarlos, al contrario, en mi disciplina está prohibido hablar de manera despectiva de otros entrenadores. Solo tenemos que buscar qué faltó para seguir creciendo y colocar a Panamá en los grandes eventos”.
Zseremeta ha visto un importante enfoque de las muchachas. “Sin embargo, lo nuevo cuesta y como todo, son jóvenes, hay resistencia, actos de rebeldía, que los vamos a ir procesando poco a poco con los mejores profesionales”, explicó.
La primera gran prueba de Kenneth Zseremeta era el torneo Preolímpico que se jugó del 28 enero al 9 de febrero de 2020 en Estados Unidos. A Panamá le tocaba enfrentar, además de las anfitrionas, a Costa Rica y a Haití.
“Trabajamos en varios módulos con miras a ese primer torneo. Hay jugadoras con mucho talento, pero hay que trabajar bastante en distintos aspectos, sobre todo el mental”, explicó el DT capitalino, quien considera que en Panamá se debe trabajar en descentralizar el fútbol.
“Hay que resolver eso cuanto antes. Debemos ocuparnos en reconocer el talento que hay en el interior, no es solo contar con jugadoras de provincias centrales.
Aquí pareciera que el talento ya está reconocido, escrito sobre piedra y no debe ser así. Debemos seguir indagando, saber por qué esa desmotivación que existe en las jugadoras del interior”.
Panamá nunca ha clasificado a un Mundial Femenino (absoluto), sin embargo estuvieron cerca para la edición 2019 que se jugó en Francia. Cayeron en un repechaje internacional ante Argentina en 2018.
“Las expectativas son muy altas. Cuando mi contrato expire en 2023 espero que sea clasificado al Mundial. Hay que trabajar en esa dirección”, cerró Zseremeta.