Más de cuatro décadas consagrada a la enseñanza de la danza.
Por: Isaac Castillero Wilson
Fotos Isaac Castillero W.
Una mezcla de energía, fuerza de voluntad y creatividad, son los atributos que denota Amparo Brito González, quien posee una larga trayectoria en el mundo de la danza como Primera Bailarina en su momento.
La danza es la ejecución de movimientos que se realizan con el cuerpo, acordes a la música que se desee bailar. Es una forma de expresar sentimientos y emociones, a través de gestos finos, armoniosos y coordinados.
Aquellos días de recorridos por diferentes escenarios a nivel mundial en representación de su natal Cuba, han quedado en un recuerdo invaluable, pues hoy se le puede encontrar impartiendo esos conocimientos en nuestro país. De esto y más Sports & Health, conversó con Amparo.
- Medalla de Oro en 1973 en el Concurso Internacional de Moscú.
- Premio «A la más excelente participación individual», en el Concurso Internacional de Japón.
- Medalla de Oro por parejas (Lázaro Carreño) y las mayores distinciones en 1983 en el Concurso Latinoamericano de Ballet y Coreografía de Brasil.
¿Por qué seguir en la danza?
Empecé desde pequeña hasta 1995, cuando me retiré al sentir que ya había cumplido y quería dejarlo de la mejor forma. Al siguiente año, decidí seguir y encontré en la enseñanza una alternativa. Agradezco a todos los que me ayudaron en un principio: Alicia Alonso, Joaquín Vanegas, Josefina Méndez y Fernando Alonso, entre otros.
¿Cómo fueron sus inicios en la enseñanza?
Entré al Instituto Superior de Arte, en Cuba, donde alcancé mi Licenciatura en Danza. Laura Alonso fue la persona que me abrió las puertas en Pro Danza. Al paso del tiempo, gané experiencia y confianza, pues no es lo mismo bailar que montar. Roberto Sosa fue uno de los que me apoyó. Desde entonces, he sentido que cuando mis alumnas bailan, yo también lo hago.
¿Qué la trajo a Panamá?
En el año 2000 se me presentó una oportunidad aquí, igualmente en Brasil, donde requerían de mis servicios. Al final, opté por la cercanía de Panamá con Cuba, por lo de la familia. He trabajado en diferentes academias, incluso tuve una. También he estado con el Ballet Nacional de este país como Directora Artística, he dictado seminarios de metodología y demás. Desde 2007 trabajo en Ballet Academy, luego que Maruja Herrera nos diera la oportunidad.
¿Qué enseña y promueve?
Ballet Clásico es lo nuestro. Buscamos desarrollar la vocación por este arte, crear alumnas de considerable nivel. El objetivo es ofrecer una formación integral para que puedan explotar sus habilidades técnicas y de expresión, que les brinde seguridad y confianza, no solo en esta actividad, sino también en sus vidas.
¿Cómo arma las presentaciones?
Depende de aspectos, como la edad, personalidad, cualidades y más. Generalmente, a las participantes más pequeñas se le buscan versiones libres y para las más grandes se necesitan mayores variaciones del repertorio clásico.
¿Cuál es el perfil de sus alumnos?
A lo largo de los años, he tenido estudiantes de diferentes edades y niveles. Hay dirigidas que se iniciaron a sus 4 o 5 años conmigo y hoy día son unas señoritas, con una técnica que me llena de orgullo.
¿Cuáles serían algunas claves para tener éxito en la danza?
Existen muchos elementos que juegan un papel determinante, que incluyen tanto al participante como el entorno donde se desarrolla. Trabajar con las más pequeñas es un factor fundamental, pues ahí están las bases y, muchas veces, es lo que marca la diferencia.
A nivel competitivo ¿qué triunfos se han alcanzado?
Con Ballet Academy, hemos logrado figurar en distintos eventos, con oro en el Concurso Danza Activa del INAC, 2009; en el Dance Educator Of America, Orlando, Florida, 2010; Concurso Estrellas Siglo XXI, 2011. Además de becas y reconocimientos especiales.
Sus alumnas han aprendido mucho, pero ¿qué les han enseñado ellas?
Que cada una es una individualidad capaz de producir en mí diversas sensaciones, alegría, orgullo, victorias y derrotas. Dedicación y esfuerzo, pues muchas llegan a sus casas en las noches, luego de sus compromisos escolares y con la academia, siendo unas niñas. Muchas son cuadros de honor en sus colegios, inclusive en ocasiones hacen las tareas minutos antes de la clase de ballet.
¿En qué proyectos trabaja?
Buscamos terminar con el Instituto Panameño de Cultura (Inac) un proyecto unificado de danza, que ayude el desarrollo de la disciplina en general, el cual podría ser implementado en los diferentes centros de enseñanza.
Consolidar a Ballet Academy como una de las mejores academias de danza a nivel nacional, que aporte técnica y habilidades acorde a los más elevados niveles, forma parte de su misión. |
¿Cómo visualiza el desarrollo de esta actividad a nivel local?
Prometedor, en cuanto a talento se refiere. La competitividad es continua, las chicas se meten en el personaje, están conscientes de lo que deben imponer, las más pequeñas realizan presentaciones exigentes pese a su corta edad..
¿Ha pensado en retirarse?
No. Pretendo seguir hasta cuando la vida me lo permita. Estoy pensando en los compromisos 2012. En mayo habrá un evento internacional en Panamá; a mediados de año celebraremos aquí el sexto encuentro (seminario) con participantes de los Estados Unidos; a final de año tendremos nuestra función anual.