Uno de los más emocionantes combates del 2012.
Por: Héctor Villarreal
El enfrentamiento entre los campeones mundiales de la OMB, Manny Pacquiao, del peso welter, y Timothy Bradley de los súper ligeros, es anunciado por sus organiza-dores como la pelea entre los dos mejores, libra por libra, de la actualidad y los promotores destacan los 11 títulos mundiales que han ganado entre ambos protagonistas.
Será el primer combate que realice en el 2012 el «Pac Man» filipino, quien ha logrado superar el millón de compradores de sus peleas en pay per view por lo menos una vez en cada uno de los últimos cinco años y es reconocido como la figura más atractiva actualmente en el boxeo mundial.
Todo indica que la presencia de Manny volverá a disparar las ventas de la señal de televisión pagada, aunque en esta ocasión está obligado a devolver a su público algo más de lo que ofreció cuando superó por puntos a Shane Mosley en un espectáculo de ritmo lento y de mutuo respeto o cuando obtuvo una estrecha y controversial decisión sobre el mexicano Juan Manuel Márquez en noviembre pasado.
El mejor
Debido a estos resultados, el debate popular por la escogencia del mejor boxeador del momento se centra entre Pacquiao (54-3-2) y el estadounidense Floyd Mayweather (42-0), pero el invicto californiano Bradley (28-0) tiene los méritos para ser mencionado en el grupo de los cinco mejores, sin dejar de reconocer al argentino Sergio Martínez y al propio Márquez, a quien el filipino no ha superado con claridad en ninguna de las tres ocasiones en que se han medido.
El panorama anteriormente descrito plantea el inminente apremio de Pacquiao, no solamente por obtener la victoria, sino por demostrar que cuenta con las cualidades para enfrentar los siguientes retos exigidos por la audiencia boxística: una cuarta pelea contra Márquez y el inevitable choque contra el invicto Mayweather.
El combate Pacquiao vs Mayweather se viene anticipando desde hace más de tres años y es visto como el enfrentamiento más atractivo que pudiera darse actualmente en el pugilismo mundial, aunque una cuarta pelea contra Márquez surge ahora como requisito previo, ya que la tercera dejó más dudas que las anteriores.
Si se logran concretar estos pleitos y el «Pac Man» consigue salir airoso, multiplicaría sus ya extraordinarios ingresos en este deporte, se convertiría en el indiscutible campeón de campeones, el mejor libra por libra del momento y tendría los méritos suficientes para ser candidato a mejor boxeador de la historia, posición que la mayoría de los expertos conceden a Sugar Ray Robinson y otros, a Muhammad Ali.
Bradley aclarará las cosas
Ese debería ser el plan ideal para una gloriosa carrera cuyo final, según ha dicho el propio Pacquiao, de 33 años, pudiera estar muy cerca; sin embargo, Bradley parece tener las armas para arruinar ese o cualquier otro proyecto y dejar claro si el rendimiento del filipino ante Mosley y Márquez ha sido el resultado de la poca motivación, de una preparación insuficiente o se trata de indicios claros del declive de la carrera de Manny.
Sin derrotas
A sus 28 años Timothy «Dessert Storm» Bradley no conoce la derrota, tiene la técnica y la agresividad para presionar a Pacquiao, acostumbra subir al ring muy bien preparado y según sus rivales anteriores, sabe ayudarse con algunas tácticas contrarias al reglamento.
Floyd Mayweather, Victor Ortiz |
Pacquiao por su parte inició desde el 16 de abril su trabajo en el gimnasio y desde su primera sesión de entrenamientos dejó ver la velocidad, la actitud y el entusiasmo que mostraba a mediados de la década del 90, cuando se iniciaba en el boxeo profesional siendo un desconocido pero ambicioso peso minimosca.
Un Pacquiao veloz y entusiasmado
Algunos técnicos cercanos a Manny atribuyen su aparente buen estado físico y mental a su reciente cambio de estilo de vida que incluye la lectura de las sagradas escrituras y disminuye considerablemente la vida nocturna.
Existen argumentos suficientes para esperar que este combate, a realizarse el sábado 9 de junio en el MGM de Las Vegas, resulte uno de los más emocionantes que se celebren este año y no sea solo un elemento de distracción, mientras el mundo continúa a la espera del mega pleito entre Pacquiao y Mayweather.