Se practica hace más de 20 años a nivel local, pero su trayectoria ha tenido altas y bajas.

¡Que no te marquen un gol! El balonmano es un deporte en equipo del que se requiere agilidad y estrategias. La meta es pasar, eludir y recibir el balón con el propósito de anotar la mayor cantidad de goles.

Llamado por algunos como el fútbol de mano, consta de siete jugadores por conjunto, quienes se enfrentan en un partido con duración de 1 hora dividida en dos tiempos de 30 minutos con un descanso de 10.

Pese ser un juego dinámico, de contacto y alta competitividad, su desarrollo en nuestro país ha sido intermitente.

Historia del Balonmano

A lo largo de la historia han sido numerosos los juegos que han utilizado las manos. A principios del siglo XX países como Dinamarca, Suecia, Rusia y otros empezaron en el balonmano, pero fue en Alemania que el deporte adquirió una estructura más acorde con lo que luego sería. Se practicaba durante la Primera Guerra Mundial. Con el paso de los años los alemanes lo popularizaron y denominaron como «Handball».

A nivel mundial este deporte es regulado por la Federación Internacional (IHF), fundada en 1946 y en sus inicios, se difundió mayormente en los países del norte de Europa. El primer partido internacional de carácter amistoso, se jugó en 1925 entre Alemania y Austria.

La disciplina se jugaba con 11 jugadores por equipo en un campo similar al de fútbol. Para 1936 logró su primera participación en juegos olímpicos (Berlín), pero con el paso de los años empezó a implementarse en la modalidad bajo techo, lo que obligó a reducir el número de participantes a siete, como se desarrolla actualmente y como ha participado desde las olimpiadas de 1972 (Munich).

Historia del Balonmano en Panamá

En Panamá la disciplina inició entre finales de los 80 y principio de los 90, por el interés de un grupo de educadores que empezaron a promocionarlo, entre ellos, la profesora Mercedes Víctor del Club Pioneros del Balonmano y el profesor Ivaldo D’lliser del Club Atlético de Balonmano.

«En la década del 80, el Ministerio de Educación trajo a un cubano a dictar un seminario de balonmano, ya que la disciplina estaba como asignatura. Con el paso de los años, surgieron los clubes que intentaban formalizar la actividad y que en 1993 unieron fuerzas para crear la federación panameña de este deporte, reconocida local e internacional», recordó D’Lliser, quien es técnico de las selecciones panameñas.

También añadió «fuimos federación de tres a cuatro años, debido a que en Chiriquí y Veraguas dejó de implementarse, solo quedaron activas las provincias de Coclé, Panamá y Colón, lo que nos obligó a convertirnos en Organización Panameña de Balonmano (Opabal)».

Desde entonces, se ha luchado por promoverlo a nivel escolar y universitario, escenarios propicios, pues cuentan con los profesores en la parte técnica, los estudiantes como los jugadores y las instalaciones como el campo a desarrollarse.Sus pasos

Actualmente, hay aproximadamente 200 participantes que lo juegan a nivel masculino y femenino desde categorías infantiles hasta la mayor.

Ricardo Turner, quien preside la organización que regula el deporte local, indica que han redoblado esfuerzos para que provincias como Bocas del Toro, Los Santos, Veraguas y hasta Darién se involucren. «Contamos con diferentes etapas, iniciación, desarrollo, especialización y alto rendimiento, esta última cuenta solo con 40 jugadores» apuntó.

Para mala fortuna del balonmano, aún no se cuenta con instalaciones adecuadas para su desarrollo y el apoyo del Estado es escaso, aspectos que dificultan su ascenso.

«Los gimnasios de las escuelas son nuestros escenarios, pero no cuentan con las medidas reglamentarias, es duro desarrollar competencias sin recursos. El Comité Olímpico Internacional nos dota de balones, las vestimentas son tradicionales de cualquier deporte…», explicó Turner.

En cuanto a competencias se refiere, Panamá ha visto acción en Campeonatos Centroamericanos de Balonmano, Campeonatos Centroamericanos y del Caribe, la Copa Centroamericana Challenge, torneos invitacionales y en los Juegos Centroamericanos 2010 (se jugaron en el Colegio Chino Panameño con un piso especial), donde se dio por primera vez la participación de este deporte en este tipo de certamen.

Entre los jugadores panameños que han figurado, sobresalen Kevin Miranda, Eduardo Estrada, Alexis Flores y Fernando Solano, entre otros.

Sus participaciones en estos eventos rayan entre dignas y modestas, donde han enfrentado a Cuba, México y otros, aunque hay que reconocer que Colombia y Costa Rica gozan de mayores recursos para su desarrollo (instalaciones, apoyo, masificación).

Entre las actividades organizadas en beneficio del deporte, recientemente se realizó en nuestro país un curso para entrenadores facilitado por Solidaridad Olímpica y dictado por el técnico español Manuel Manas. Para finales de este mes Panamá será sede de la realización del congreso anual de la Confederación Panamericana de Balonmano, con miras a buscar alternativas en pro del deporte.

Por: Isaac Castillero Wilson

Fotos: Cortesía Pandeportes