Es mayor la alegría de dar que la de recibir… esta panameña que lucha por más oportunidades y participación de las personas discapacitadas en la sociedad, conversó con Sports & Health sobre lo que ha sido su trayectoria en Olimpiadas Especiales
Por: Isaac Castillero Wilson
Fotos: Isaac Castillero Wilson
¿Cuándo llegó a Olimpiadas Especiales?
En 1991 me vinculé a OE, porque el que presidía esta entidad en ese entonces, Jaime Alemán, me invitó a participar de sus actividades; ya que yo había dado a luz dos años antes a mi hija Ximena, que tiene síndrome de down y quien hoy es atleta líder. De ahí, ha sido un largo camino.
Pocos meses después de estar colaborando se me nombró como Presidenta. Pertenecer a este equipo me llena de orgullo. Ya son más de 20 años en esta desafiante y gratificante labor. Además, soy parte de la directiva mundial (Special Olympics), con sede en Washington, desde hace nueve años y donde participamos en la toma de decisiones para 180 países.
¿Qué intenta lograr en las personas que viven en este entorno?
Nuestro objetivo es que más personas se unan a este movimiento, que utiliza al deporte como instrumento para darle oportunidad a los afectados con discapacidad intelectual de tener una vida más sana y agradable. En fin, darle un sentido de existencia diferente, resumido en responsabilidad, competitividad y trabajo en equipo.
¿Qué enseñanzas le ha dejado esta labor?
Que las personas a las que les llaman con discapacidad, tienen más capacidades de lo que imaginamos. Ellos nos dan lecciones de vida, con sus esfuerzos, resultados y son genuinos en su forma de ser. He aprendido que la vida va más allá de tener un grado de inteligencia, sino que cada persona es un ser especial y tiene algo que aportar.
¿Cómo se logra el vínculo entre quienes necesitan ayuda y quienes pueden brindarla?
Eso es muy importante. Yo diría que arriba del 95% de nuestros atletas a nivel nacional no tendrían los recursos para tener la oportunidad que les da Olimpiadas Especiales y eso es gracias a la promoción y difusión que se hace en busca de cumplir con las distintas necesidades. Somos una organización que busca siempre mantenerse activa para mantener esa interacción con quienes puedan apoyar o sumarse.
¿Qué logros deportivos han alcanzado?
Olimpiadas Especiales en Panamá nace desde 1983 y desde entonces, hemos participado en más de 20 competencias internacionales. Cada año tenemos delegaciones más numerosas (por encima de 50 personas) y a la vez más medallas logradas en los diferentes eventos, entre ellos: Juegos Mundiales de OE (Grecia 2011, Shangai 2007, Irlanda 2003), sin obviar, Juegos Regionales, inclusive hemos sido sede en su momento.
¿Siente que han reconocido su labor?
Hace algunos años, recibí de parte de las Naciones Unidas un reconocimiento por la labor de Olimpiadas Especiales Panamá. El año pasado el presidente Ricardo Martinelli me otorgó la Orden María Ossa De Amador, como distinción al trabajo realizado con esta organización.
¿Cuál es la realidad de OE Panamá?
Actualmente tenemos mil 500 atletas a nivel nacional y realmente es poco en comparación con la cantidad de personas con discapacidad intelectual que hay en el país, que está sobre los 90 mil. Por ello la necesidad de acaparar más nuestro servicio. Cabe mencionar, que la sede de la oficina regional para América Latina esta aquí en Panamá y eso es una ventaja con miras a seguir avanzando en nuestras proyecciones.
¿Por qué las familias con hijos afectados deben inscribirlos en OE?
Esto es un símbolo de esperanza y oportunidad. Se brinda el programa de entrenamiento deportivo y competición atlética durante todo el año que permite desarrollar su valor, demostrar su determinación y edificar su autoestima. Pueden ser incluidos en los diferentes programas, que van desde los 5 años a más de 50.
¿Cuáles son sus próximos objetivos?
Lograr la mejor preparación y representación en los Juegos Mundiales de Olimpiadas Especiales 2015, que se realizarán en Los Ángeles. Igualmente seguir reclutando más atletas a nivel nacional.