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| Fernando Revuelta Atleta del Team SAUCONY Sub-Campeón Nacional de Maratón www.runninginpanama.blogspot.com   |
Cada cierto tiempo se celebran competiciones Internacionales de atletismo como los Juegos Olímpicos, Campeonatos del Mundo o Campeonatos Regionales, y en cada una de estas citas siempre suele surgir la misma pregunta: ¿Porqué Panamá no tiene más atletas élites que puedan estar en disposición de disputar las medallas?
La respuesta no es sencilla e involucra múltiples aspectos, algunos de estos están bajo nuestro control y pueden ser mejorables, mientras que otros están determinados por la genética y el biotipo del atleta.
DESCUBRIENDO EL TALENTO
Aunque hay casos de atletas de alto nivel que llegaron al atletismo a una edad tardía, la mayoría de ellos fueron descubiertos en su niñez o juventud. Se hace totalmente necesario el disponer de técnicos calificados que puedan ejercer como “ojeadores” en las escuelas y colegios del país, así como en las competencias que se desarrollan para menores tanto en pista como en ruta. En ocasiones los propios maestros de educación física se percatan del potencial innato que tiene alguno de sus alumnos para una determinada modalidad deportiva, pero generalmente no tienen los recursos ni los medios para dedicarle la atención necesaria o referirlo a alguien que se la pueda dedicar. En estas edades tempranas es cuando con una buena orientación se deben poner las bases para el desarrollo de habilidades técnicas imprescindibles para que el atleta tenga éxito a futuro, por encima del trabajo de fuerza o resistencia que ya se potenciará más adelante.
Aunque hayamos tenido la fortuna de poder detectar un “diamante en bruto”, en este punto nos encontraremos con un elemento añadido de dificultad: el ambiente familiar y social del niño o joven. En un mundo en el que casi todos los menores se fijan en grandes estrellas deportivas del fútbol como Messi o de otros deportes mediáticos como basketbol, béisbol o fútbol americano, resulta complejo convencer tanto al propio prospecto como a su familia de la conveniencia de practicar una disciplina minoritaria como el atletismo. En la mayoría de los casos la familia pensará que no hay un futuro económico en ello, y no apoyarán tal decisión. Para el menor también resultará difícil optar por un deporte individual como el atletismo, cuando los deportes de equipo tradicionales son socialmente mejor aceptados y son los que practican el resto de sus compañeros y amigos.
ALCANZAR EL ÉXITO A SU DEBIDO MOMENTO
Cada atleta es diferente en su genética y fisiología, por lo que no es nada sencillo planificar como va a ser su entrenamiento y desarrollo con el objetivo de que pueda alcanzar los mejores resultados a su debido tiempo. Por desgracia en muchas ocasiones vemos como atletas que tenían un prometedor futuro terminan de manera anticipada su carrera deportiva, bien por lesiones recurrentes o desmotivación. La necesidad de tener que mostrar resultados y la presión de querer alcanzar el éxito antes de tiempo conlleva el forzar en los entrenamientos y acortar los ciclos de trabajo/descanso, entrando en una espiral en la que por mucho que se entrena no se logran las mejoras esperadas y se puede caer en el sobreentrenamiento y las lesiones.
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| Usain Bolt de Jamaica baila luego de ganar su tercera medalla de oro en los 4×100 metros masculinos, en el Campeonato Mundial de Atletismo en el estadio Luzhniki en Moscú, Rusia. Agosto 2013 |
Esa presión puede tener su origen en el propio atleta, pero generalmente viene impuesta del círculo familiar o del entorno del equipo/entrenador. La presión per se no es mala y puede servir a los efectos de buscar una mejora en la evolución de las marcas, pero cuando se convierte ya en un elemento de presión psicológica unido a sentimientos de miedo o angustia, puede desembocar precisamente en el objetivo contrario al deseado con el abandono total del deporte como única vía de escape.
SOLVENCIA ECONÓMICA
Para poder optar a ser un atleta de nivel élite se necesita disponer del tiempo y los recursos necesarios para realizar en plena capacidad las fuertes sesiones que los entrenamientos requieren. Aunque el apoyo de las instituciones públicas que se pueda recibir es importante, casi siempre será imprescindible apoyarse en la empresa privada para generar mediante patrocinio y publicidad unos ingresos económicos que permitan mantener el nivel de vida del atleta y su entorno. No significa que un deportista con mucho sacrificio no pueda llegar a compaginar una actividad laboral con su carrera deportiva, pero definitivamente estará en condiciones desfavorables frente a otros que no deban de cumplir un horario de trabajo paralelo.
Aunque en nuestro país la empresa privada está comenzando a visualizar la esponsorización deportiva como una buena forma de publicidad, todavía los presupuestos que se manejan en el atletismo son menores y realmente no permiten vivir de ellos. Por este motivo nuestros mejores prospectos se ven obligados por necesidad a estar compitiendo en exceso en búsqueda de premios e incentivos para complementar su presupuesto de gastos. Todo ello afecta negativamente a la planificación anual de su calendario, acumulando en algunas temporadas 30 o más pruebas cuando no deberían pasar de 15 con sólo 2 o 3 objetivos principales.
Resulta a veces muy fácil criticar a nuestros seleccionados cuando van representando al país por sus pobres resultados en concursos y campeonatos donde el único estímulo es una medalla, pero hay que entender que sin el apoyo debido no se les puede exigir mucho más, ya que como todos por encima de atletas son personas que tienen que pagar gastos y facturas a final de mes. De un trozo de metal colgado de un cordel no se puede vivir.
INSTALACIONES Y EQUIPO TÉCNICO
Aunque una buena genética debe ser el punto de partida de un deportista, esa capacidad innata hay que desarrollarla, tanto se trate de atletas de velocidad como de fondo. Eso es lo que diferencia que algunos lleguen a ser Campeones y otros no. En cuanto al entrenamiento es fundamental contar con buenos técnicos y programas, instalaciones adecuadas donde practicar, tener acceso a servicios médicos y de fisioterapia, disponer de material y equipos adecuados. El que en Kenia, que es el gran semillero de fondistas en la actualidad, no haya casi instalaciones deportivas ni pistas adecuadas, sean escasos los entrenadores con titulación de alto rendimiento, o muchos atletas no sepan lo que es un masaje o revisión médica, no contradice el hecho de que si tuvieran todo lo anterior serían con toda probabilidad aún mejores.
REFLEXIÓN FINAL
La próxima vez que nos sentemos cómodamente ante una TV para ver una competición internacional de Atletismo, acordémonos de que los atletas no surgen por generación espontánea ni caídos del cielo. Un super atleta como Usain Bolt no es fruto de la casualidad. Ser un atleta élite requiere en primer lugar de tener una predisposición genética adecuada para ello, ser detectado a tiempo, y desarrollar adecuadamente su carrera con mucho sacrificio y trabajo. Incluso haciendo todo eso no será ninguna garantía de que alguna vez se pueda subir a un podio a recibir una medalla. Antes de criticar, preguntémonos que estamos haciendo para apoyar a esos atletas locales, muchos de ellos de origen humilde, que incluso careciendo de un calzado adecuado, se ponen con orgullo su camiseta tricolor para representar a Panamá.
