Los ligamentos en las rodillas y la estabilidad corporal.
Por: Félix Josez Corro
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Este marzo, los panameños nos enteramos a través de los medios, que el futbolista panameño Ismael Díaz, delantero del Deportivo la Coruña, fue intervenido quirúrgicamente en España, por una lesión en la rodilla. Aunque la recuperación ha sido favorable, mantiene preocupado al onceno panameño, con miras al Mundial de Rusia 2018.
Y es que en la actualidad, gracias a las investigaciones, se han podido desarrollar grandes avances que indican que los traumas en rodillas y piernas, no son un impedimento para realizar la actividad deportiva o física que más le gusta. Hay solución para que caminar, montar bicicleta o conducir un vehículo, no se interpongan en su estilo de vida, para ello conversamos con el Dr. Raúl Arjona S., especialista en Ortopedia, traumatología y columna.
Todos sabemos que la praxis del ejercicio físico es sinónimo de salud corporal, aunque sino se realiza de forma correcta puede sufrir algunas lesiones como la inflamación del tendón, conocida como tendinitis. Esto debido al sobrepeso, mala postura o la repetición de una mala rutina de entrenamiento.
Por lo tanto, sin importar la disciplina física que se desarrolle, “antes de cualquier sesión se debe realizar un calentamiento y estiramiento previo, además de mantener una adecuada masa muscular”, enfatizó Arjona. Esto ayudará a subir la temperatura corporal, evitar lesiones y fortalecer la musculatura.
Recordemos que los tendones se encargan de mantener esa unión entre el músculo y el hueso. Con el pasar del tiempo, debido a la falta de colágeno y elastina, estos se tornan más rígidos y débiles.
Otras afectaciones
Nos encontramos también con la lesión de ligamentos cruzados, indicó el Dr. Arjona, “que consiste en una alteración parcial o completa de la integridad de uno de los ligamentos internos que proporciona la estabilidad en el plano antero posterior de la rodilla”.
Este tipo de lesión se puede combinar con la fractura de ligamentos colaterales, cruzado posterior y/o menisco. Las personas que practican deporte son mucho más susceptibles a este tipo de afectaciones.
El Dr. Arjona explicó que si la lesión es menor 30% del grosor del ligamento (confirmado con estudios de resonancias) se puede manejar de manera no quirúrgica, de lo contrario o si hay síntomas de inestabilidad la cirugía sería el tratamiento recomendado.
Las terapias iniciales están enfocadas en los medios físicos para el proceso de desinflamación como: compresas frías / calientes; estimulación eléctrica (tens) y movimientos pasivos y asistidos de los rangos articulares. Posteriormente la rehabilitación y fortalecimiento muscular específico.
Es importante encontrar solución a las lesiones antes detalladas, para evitar que se conviertan en una condición crónica. A lo que el Dr. Arjona recomienda un adecuado reposo por el tiempo indicado y la rehabilitación precisa.
