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Una enfermedad autoinmune que causa inflamación y dolor en las articulaciones, aunque también puede afectar a otras partes del cuerpo.
Por: Zulay Espinosa V.
El sistema inmunológico o lo que comúnmente se conoce como «las defensas» está diseñado para proteger al cuerpo humano de agentes extraños, como: bacterias, virus, hongos, etc. El sistema inmune también reacciona a sustancias que considera como extrañas o ajenas.
En algunas ocasiones, el sistema inmunológico no reconoce algunos tejidos del cuerpo como propios y los trata como extraños, por eso los ataca. Esta es la causa de la artritis reumatoide, donde el sistema inmune no reconoce los tejidos de las articulaciones (principalmente) y las ataca, inflamándolas y trayendo como consecuencia dolor, y a largo plazo deformidades, si el paciente no se controla adecuadamente, explica detalladamente el Dr. Nelson Rodríguez, especialista en Medicina Familiar.
Cuando decimos que se trata de una enfermedad autoinmune, decimos que es una enfermedad en la cual tu cuerpo ataca a tu cuerpo. En el caso de la artritis reumatoide, ataca mayormente a las articulaciones.
Mujeres
Son las que principalmente la padecen. Por lo general, aparece en adultos jóvenes pero puede aparecer a cualquier edad. Es más, existe una variedad de artritis reumatoide juvenil que no es tan frecuente.
Síntomas que indican su aparición
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Clásicamente, articulaciones pequeñas inflamadas y dolorosas (las manos y pies); pueden afectarse otras articulaciones como las rodillas y codos. Hay dificultad al movimiento por el dolor e inflamación, principalmente en las mañanas. Hay otros síntomas no asociados a las articulaciones, como falta de apetito, fatiga y a veces fiebre.
Prevención
En muchos casos, hay un componente genético de base; en otros, hay gatillos ambientales que disparan la enfermedad. En un gran número de personas, es una mezcla de ambos factores. Y como en todas las condiciones de salud, llevar un estilo de vida saludable, actividad física y alimentación balanceada ayuda a prevenir enfermedades.
Tratamiento
Es muy importante tener presente que todo paciente con los síntomas descritos debe acudir a su médico de cabecera, quien es la persona idónea para hacer el diagnóstico.
Una vez hecho el diagnóstico, el paciente debe comprender que se trata de una enfermedad crónica, es decir, se controla, pero no se cura.
Por lo anterior, es indispensable que el médico oriente al paciente y lo acompañe en el proceso de aceptación de su nueva condición.
Los medicamentos son un pilar esencial en el manejo de esta enfermedad, ya que buscan regular la actividad inmunológica del cuerpo para controlar la inflamación y reducir los síntomas.
Una vida normal
El diagnóstico de esta enfermedad no significa una vida de esclavitud o de deformación de manos y articulaciones. Con los tratamientos disponibles actualmente, un paciente con artritis reumatoide puede llevar una vida normal. Si está bien controlado y en seguimiento con su médico, estará alejado de las temidas deformaciones y otras complicaciones de la artritis reumatoide. Entre más temprano inicie el tratamiento, se lograrán evitar daños a las articulaciones y órganos de forma más efectiva.
Dr. Nelson Rodríguez
Centro Médico Nacional, 2do piso
Teléfono: 6616- 5968
Mobilphone 811
