Fernando Revuelta Atleta del Team SAUCONY Sub-Campeón Nacional de Maratón www.runninginpanama.blogspot.com |
Los corredores como otros muchos deportistas realizamos la mayoría de nuestras prácticas al aire libre. Ello supone estar una media de tiempo de 1 a 2 horas diarias expuesto a los rayos del sol, con los posibles efectos nocivos para nuestra salud sino tomamos las precauciones necesarias. Uno de los errores frecuentes que cometemos es pensar que no corremos riesgo de daño a nuestra piel cuando el clima está nublado, como si las nubes tuvieran la capacidad de servir igual que un muro ante los Rayos Ultravioleta (UV). Lamentablemente esto no es así, y los problemas asociados a la exposición solar se multiplican cada día más llegando a ser el cáncer de piel uno de los más frecuentes. En la actualidad los fabricantes de ropa deportiva han desarrollado nuevos materiales y componentes con el objetivo de bloquear el mayor porcentaje posible de estos Rayos.
LOS RAYOS ULTRAVIOLETA (UV)
El Sol emite Rayos Ultravioleta, los cuales no pueden ser percibidos por nuestra vista, pero si pueden causarnos enfermedades y problemas derivados de una prolongada o frecuente exposición. Estos Rayos se diferencian por la longitud de su onda medida en nanómetros, clasificándose en tres categorías:
- Rayos UVA, con la longitud de onda más larga entre 320 a 400 nm, constituyen aproximadamente un 90% del total. Los UVA penetran muy profundo en la piel, y producen el bronceado rápido. Son responsables de arrugas y envejecimiento. No importa si el clima está despejado o hay nubosidad, los rayos UVA están presentes en toda circunstancia.
- Rayos UVB, con longitud de onda mediana entre 280 a 320 nm, son un 10% del total. Los UVB solo penetran en la capa superficial de la piel, y producen un bronceado lento. Son más frecuentes al mediodía y tienen mayor peligro para nuestra piel que los UVA, pudiendo causar fenómenos cancerígenos. La atmósfera atenúa en parte la llegada de estos rayos a nuestro alcance.
- Rayos UVC, con la longitud de onda más corta, entre 200 a 280 nm. Serían los más nocivos para nuestra salud en el caso de que llegasen a penetrar nuestra atmósfera. Por ese motivo es tan importante que se mantenga la capa de ozono e implementar buenas prácticas ambientales.
FACTOR DE PROTECCIÓN ULTRAVIOLETA (UPF)
Mediante esta escala se puede determinar qué porcentaje de Rayos UV son bloqueados por un tipo de tejido específico, que será utilizado posteriormente para la fabricación de ropa deportiva. Así un UPF+50 indica que aproximadamente un 97% de los Rayos UV serán atenuados por ese tejido, sin que incidan en la piel de la persona. Las marcas deportivas están en continua investigación y desarrollo para ofrecer cada vez una mayor protección, poniendo énfasis tanto en nuevos tipos de materiales y aditivos, métodos de costura, gama de colores, grado de elasticidad y nivel de grosor.
El algodón es el material con mejor índice UPF, seguido del polyester, y por último las licras y la seda. Respecto de los colores, los más oscuros, como los negros y azules darían mayor protección contra los Rayos UV, pero por el contrario serían menos frescos que los colores claros como el blanco. Del mismo modo una prenda gruesa bloquearía más este tipo de Rayos, pero definitivamente aumentaría la temperatura corporal del usuario.
Parece que estaríamos entonces ante una diatriba, ya que las vestimentas que más nos protegerían de los Rayos UV no serían precisamente las más frescas, transpirables, ni ligeras para nuestra práctica deportiva. Otro elemento que añade más confusión es que la mercadotecnia y rotulación de las diferentes marcas no ayuda precisamente a que sea fácil para los consumidores comparar entre productos de varios fabricantes y ver las ventajas de unos sobre los otros.
VISERAS Y OTROS COMPLEMENTOS
Es obvio que en lo posible intentaremos realizar nuestras rutinas de ejercicio en horas de la madrugada o tarde/noche para evitar altas temperaturas y al mismo tiempo el estar expuestos a los Rayos UV. Esto es una costumbre general a nivel mundial, es de gran importancia en Panamá por nuestra ubicación tropical.
Adicional a nuestra vestimenta o uniforme usual, hay otros accesorios que pueden hacer una gran diferencia, como una sencilla visera para nuestra cabeza, o manguitos en los brazos. El que llevemos ropa o accesorios sobre nuestra piel no conlleva obligatoriamente el hecho como hemos visto de que el 100% de los Rayos UV queden bloqueados, por lo que como precaución no está de más, sobre todo en niños y jóvenes de piel muy clara, la aplicación de cremas con un factor de protección alto en todo el cuerpo. También hay que tener presente que casi todos los materiales al estar húmedos pierden en torno a un 50% de su protección UPF.
RECOMENDACIONES A CONSIDERAR
Por mucha protección UPF que pueda tener una prenda a la hora de su compra, hay que considerar una serie de cuidados para que la misma no quede neutralizada o disminuya considerablemente por un mal mantenimiento. Este tipo de tejidos es recomendable lavarlos en frío o con agua ligeramente templada, y no en máquina sino a mano casi sin frotar. Se puede utilizar algún jabón suave, pero no detergentes fuertes ni cloro. El secado deberá ser también en un lugar aireado y a la sombra, obviando fuentes de calor como la secadora. Al tratarse de prendas deportivas obviaremos el planchado que realmente no tiene sentido y puede dañar los tejidos. Algunos de los aditivos que se añaden a los tejidos con la función de servir de bloqueador pueden ir desprendiéndose con el uso, por lo que la vida útil de estas prendas suele ser más corta de lo usual.
Gastar en salud siempre será a la larga una excelente inversión, así que a la hora de comprar tu vestuario no tengas solo en cuenta modas o bonitos diseños, y fíjate también en el factor UPF de las etiquetas.
Nos vemos en la Ruta?