Este libro no es un tributo al sexo y la pornografía como se entiende, más bien, reúne formas y leyes de conductas para hombres y mujeres deseosos por experimentar
Por: Yaribeth Vásquez
La Academia Internacional de Sexología reportó en su último informe anual que, en todo el mundo, hay aproximadamente 200 millones de libros que se han escrito sobre el sexo. ¿Es algo impresionante no? Pero entre ellos, sólo hay uno que goza del reconocimiento universal y ha sido coronado como el verdadero manual de la vida sexual: el Kamasutra.
Increíblemente, esta literatura ha trascendido generaciones, y son pocos, lo que pueden decir que nunca han escuchado hablar de esta pieza que tiene más de dos mil años circulando por el mercado. Pero dejando a un lado todo este reconocimiento, hay una realidad que muchos no toman en cuanta, y es que son pocos los que realmente han querido o han tenido la oportunidad de leer y entender el libro del Kamasutra. Otros, si acaso, han visto algunas de las tantas poses que recomienda el libro en algún texto, artículo, video, o panfleto que las mencionan.
Con esto, planteamos que el Kamasutra ha sobrevivido siglos porque no se muestra en su esencia misma, sino que ha sido la punta de lanza para vender y estimular sexo. Dicho de otra manera, ha sido el instrumento de inspiración para crear juguetes, videos, e incluso, diferentes prácticas sexuales relacionadas con el sadomasoquismo, orgías, lesbianismo y demás actividades que dan rienda suelta a la imaginación del hombre.
UN LIBRO ALTAMENTE COMERCIAL
Al respecto, Ciro Kuiper, de la Asociación Mundial de Sexología, resume que todo el boom del Kamasutra radica en que se ha sabido reinventar y evolucionar.
Por ejemplo, explica el experto, sólo hay ocho poses del Kamasutra que sirven en el mercado, o que siendo más realistas, pueden ser practicadas por «los mortales normales». Otras más, servirían para jugar lo que se llamaría «aventuras en la cama» y las demás, son sólo un compendio de acrobacias, en extremo complicadas y se dirigen a personas que tienen la capacidad física para hacer galas de sus habilidades como contorsionistas.
Esta evolución que ha presentado el Kamasutra era necesaria según Kuiper, quien agrega, que en lo absoluto afecta su esencia, más bien, la fija en el tiempo.
En este sentido, el experto opina que los cambios responden al hecho de que se trata de un libro que nació de la recopilación de mil aforismos del amor por allá por el siglo III, después de Cristo. Primero, basado en las experiencias y reflexiones de un hombre llamado Nandim, quien dio la base para que docenas de autores interpretaran y abreviaran sus visiones, siendo Mallanaga Vatsyayana, el más conocido de todos por el Kamasutra.
«En muchas conferencias de sexología he escuchado a la gente hacerse la misma pregunta: ¿Por qué el Kamasutra es un compendio de poses complicadas, que muy difícilmente, harán que sus practicantes lleguen al clímax?. Para mi la respuesta es sencilla, pero para eso, hay que saber algo de historia, como por ejemplo, que el libro fue dedicado a los ciudadanos acomodados de la sociedad india para instruirlos en las artes amatorias y que se ha convertido en una crónica de las costumbres de la época, es decir, fue concebido para satisfacer los más locos y casi imposibles deseos de la época», detalló el experto.
ENTRE LÍNEAS
Kuiper opina que más que enfocarse en las poses del Kamasutra, hay que leer los mensajes entre líneas que deja la literatura y que en su opinión, si pueden ayudar a mejorar las artes sexuales. Entre ellos están las formas de besar y los consejos para que la penetración sea placentera.
En este último punto se habla de aprender a utilizar el pene como una herramienta ágil de explotación sexual. Y una de las técnicas hace alusión a como empujar fuertemente hacia el interior de la vagina, para luego, moverse muy despacio hacia fuera o, salir del todo de la cavidad para y volver a entrar sin titubeos.
También se encuentra satisfacción en la práctica de meter y sacar el pene con movimientos rápidos y superficiales de la vagina.
POSES UNIVERSALES
En resumen, el Kamasutra no es solamente sexo y pornografía, como se entiende, sino que incluye formas y leyes de conductas para hombres y mujeres deseosos por experimentar. Si el ser humano logra cumplir estas metas, podrá sobrevivir a cualquier circunstancia, logrando ser una buena pareja. Entendiendo esto, nos damos cuenta de que es una forma de ver el mundo, en la cual el Kamasutra es una parte fundamental para lograr la plenitud del ser y no sólo para tener relaciones sexuales y procrear. Algunas de las poses, rescatadas por el Kamasutra, que han dado la vuelta al mundo y realmente han cumplido su objetivo de crear lazos sexuales efectivos.
TABLITA o destacado:
POSTURAS:
Abierta: La mujer pasa las piernas por encima de los brazos de su compañero mientras este se apoya en la cama. Es una postura muy satisfactoria para amantes experimentados y mucho más relajante que otras posturas, tiene la ventaja que los amantes se miran a la cara y pueden hablarse.
Muy abierta: Es igual que la anterior pero la amante pasa las piernas por el cuello de su compañero y le mantiene junto a si en amorosa posición.
Postura de indra: La mujer se tiende sobre la cama con las piernas flexionadas y las rodillas a la altura de la barbilla, sus pies descansan sobre el pecho de su compañero que de rodillas sujetándole las nalgas la penetra. Solo las personas con cuerpo más flexible pueden adoptar esta postura.
Semi-comprimida: Partiendo de la postura de Indra, la mujer desliza una pierna pasándola por el costado de su compañero y coloca la planta del otro pie sobre su pecho, este procurará no empujar con demasiada fuerza porque de lo contrario producirá molestias en lugar de placer. La mujer puede controlar los movimientos de su compañero e incluso la profundidad de la penetración.
Costado: Ambos amantes yacen de costado y sus sexos se encuentran y se funden, se enlazan brazos y piernas y se mueven acompasadamente procurando la mayor fricción para ambos. Es esta una postura muy relajada, para cuando están cansados o cuando la edad no permite otras virguerías.
Yegua: El hombre permanece sentado con las manos apoyadas hacia atrás sobre la cama y su compañera se sienta de espaldas sobre su pene se apoya en las rodillas y se inclina hacía atrás. Es una postura divertida pero la mujer ha de ser un poco cuidadosa porque puede hacer daño en el pene si sus movimientos son muy enérgicos.
Presión del elefante: Es la típica postura de penetración por detrás. La amante se colocará de rodillas sobre la cama con la espalda arqueada y su compañero entrará por detrás empujándola por la cintura. El hombre tiene aquí una posición de dominio y muy activa porque marca el ritmo de la penetración y decide lo que se hace.
El toro y la vaca: El simbolismo del apareamiento entre animales produce en algunas parejas un aumento de la excitación. En esta postura la mujer se apoya sobre las manos mientras permanece con las piernas estiradas, su compañero penetra por detrás de pie, simulando la relación entre un toro y una vaca. Debido que simulan la unión sexual de los animales, están posturas son muy divertidas si se acompañan de gestos o sonidos.
