En nuestra práctica diaria escuchamos a pacientes aquejar un cuadro de resfriado o alergia…
Que no se quita inclusive por varios meses, dolores de cabeza y cara, nariz tapada o congestionada, con mucosidad nasal purulenta y escurrimiento posterior de mucus a la garganta. Es probable que este paciente esté padeciendo a un cuadro de rinosinusitis.
¿Por qué ocurre?
Con frecuencia escuchamos el término sinusitis, pero lo correcto es hablar de rinosinusitis ya que la respuesta inflamatoria compromete la mucosa de nariz y los senos paranasales. Las cavidades paranasales son espacios llenos de aire en el cráneo y cubiertos de membrana mucosa. Están localizados en la región de la frente, entre los ojos y en las mejillas. Cuando los senos paranasales están sanos, sus áreas de drenaje (ostium) están abiertas permitiendo el drenaje de mucus, la circulación del aire y se encuentran libres de bacterias (son estériles). Cuando se inflaman los senos paranasales se bloquean los puntos de drenaje, ocurre acumulo de secreciones y pueden infectarse con virus o bacterias.
La principal causa de rinosinusitis aguda es por viruses (el más frecuente Rinovirus); sin embargo, un pequeño porcentaje puede hacer una sobreinfección bacteriana. Entre un 0.5 a 2% de los adultos y un 10% de los niños con rinosinusitis viral (resfrío común), pueden presentar rinosinusitis bacteriana.
El Diagnóstico
Este se basa en la clínica que presenta el paciente. Los signos mayores incluyen dolor o presión en la cara, congestión, obstrucción nasal, rinorrea, pus en cavidad nasal, pérdida del olfato (hiposmia/anosmia), fiebre en los cuadros agudos. Los signos menores incluyen cefalea, mal aliento (halitosis), decaimiento, dolor dental, tos y dolor de oídos.
Hay factores que afectan el adecuado aclaramiento de las cavidades paranasales. Se incluyen la exposición a alérgenos provocando crisis alérgica (polvo, ácaros, polen, etc.), el cambio de temperatura (clima artificial en un país tropical), la contaminación del aire (se ha triplicado el número de partículas en el aire de nuestra ciudad por el aumento de vehículos a motor y el auge en la construcción), exposición al humo de tabaco (activo o pasivo) y otros agentes irritantes e inflamatorios (perfumes y detergentes). Todos pueden afectar la función de los cilios en la mucosa ( funcionan como escobas que mueven el mucus desde los senos paranasales hacia la cavidad nasal). Se paralizan los cilios y las secreciones quedan retenidas dentro de la cavidad facilitando el desarrollo de infección bacteriana.
Se puede presentar rinosinusitis después de un cuadro viral, una crisis alérgica o exposición a agentes irritantes. En los casos de rinosinusitis bacteriana el diagnóstico debe ser por un médico y el tratamiento con antibióticos para curar la infección y evitar complicaciones.
Aguda o crónica:
La rinosinusitis puede ser aguda o crónica. La primera dura menos de cuatro semanas con resolución completa del cuadro. Y la crónica demora más de 12 semanas.
La evaluación de una rinosinusitis la debe realizar un otorrinolaringólogo quien hará una historia clínica, examen físico, endoscopia diagnóstica para identificar desde dónde drena pus y estudios de imagen escaneo de las cavidades paranasales (tomografía sin contraste).
El médico puede identificar tumores o pólipos, desviación septal, crecimiento de los cornetes, cuerpos extraños (especialmente en niños) y otras patologías que obstruyen el drenaje de las cavidades. Una vez identificados los factores predisponentes, el médico especialista puede hacer el planeamiento para corregir estas alteraciones.
Prevención
La mejor forma de prevenir al rinosinusitis es el manejo adecuado de las crisis alérgicas y los resfríos. Además vacunarse contra la influenza (anualmente) y neumococo (niños y ancianos), lavado de manos frecuente, una buena alimentación refuerza el sistema inmunológico, evitar agentes contaminantes y humo de tabaco, mantener una buena hidratación (evitar tener sed) y manejo del estrés.
Dr. Carlos A. Beitia S.
Otorrinolaringología y Cirugía Endoscópica
de los Senos Paranasales.
Centro Médico Paitilla
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