Inculcar un estilo de vida saludable desde casa es primordial, ya que los niños y jóvenes pasan gran parte del día en el entorno escolar.
El regreso a clases está a la vuelta de la esquina, tras dos años de pandemia (2020-2021) y aún en el 2023 se recomienda seguir promoviendo las medidas higiénicas para preparar los alimentos.
No solo es importante elegir los alimentos adecuados para favorecer el crecimiento de los niños y jóvenes, a este reto se suma uno más, el de una manipulación que evite un riesgo de contagio de enfermedades para los nuestros y para los demás. La OMS nos recomienda la práctica de hábitos saludables y actividad física, que es fundamental para prometer nuestra salud futura y la de nuestros hijos.
Inculcar un estilo de vida saludable desde casa es primordial, ya que los niños y jóvenes pasan gran parte del día en el entorno escolar. La hora de la merienda es crucial, es donde ellos manipularan sus alimentos, conviven con sus compañeros y realizaran actividades de contacto como juegos, deportes y demás.
Por lo tanto, para la merienda escolar hay algunos puntos sobre los cuales conviene estar alertas y ser cuidadosos:
Merienda: Se recomienda que la merienda sea preparada en el hogar y que sea saludable; es decir, que incluya frutas, vegetales, yogurt o leche. Si la compramos durante el camino, debemos asegurarnos que las personas que la preparan cumplan con una adecuada manipulación de alimentos, y si es un producto empacado o embotellado, es importante lavarlo o limpiarlo de forma adecuada con agua y jabón o alcohol.
En cuanto al consumo de alimentos saludables durante el recreo escolar, “Las meriendas constituyen una fuente de vitaminas y minerales necesarios para el crecimiento y desarrollo de los niños. Para cubrir los requerimientos diarios de nutrientes es necesario que se consuma variedad de alimentos. Se debe incluir varios grupos de alimentos, por ejemplo, lácteos (yogurt, queso o leche), frutas, vegetales, alimentos de origen animal y carbohidratos (cereales, pan integral, granos o semillas, por ejemplo). Las meriendas bien presentadas y con alimentos saludables de varios colores, contribuyen a fomentar hábitos saludables de alimentación”, señala Francisco Herrera Morales, nutricionista de Productos Nevada.
Además, las bebidas como los néctares y leches saborizadas reducidas en azúcar son una opción saludable, nutritivos, con mucho sabor y muy prácticos para colocar en la lonchera.
Los néctares de Nevada además de estar reducidos en azúcar añadido, contienen hasta un 40% de fruta, sin edulcorantes artificiales y fortificados con multivitaminas. “Estos néctares tienen múltiples beneficios en sus ingredientes como vitamina C, vitamina B6, vitamina B12, ácido fólico y zinc. Cada uno de estos elementos puede ayudar a reforzar el sistema inmune, contribuir en la reducción del cansancio, la fatiga, y afianzar la concentración mental”, añade Francisco Herrera Morales.
Recipientes: Hay que elegir un recipiente que se pueda abrir fácilmente, así se evita que maestros, encargados o los compañeros manipulen la merienda de otros tratando de ayudar.
Manipulación: Evitar que esa merienda se coma “con la mano”. Por ejemplo: si incluye frutas, en lo posible tratar de que esta vaya cortada o en porciones y con la ayuda de un cubierto o pinchito la puedan comer sin tocar.
Para las bebidas es propicio que los niños y jóvenes lleven su propio termo, botellas de agua o bien envases individuales para minimizar los riesgos de compartir.
Garantizar la salud escolar es primordial, es por ello que el MINSA recomienda: “Mantener una escuela limpia y aseada, lo que asegura una correcta educación de los estudiantes. El apoyo activo de padres de familia, docentes y estudiantes” también juega un papel importante. Inculcar hábitos saludables desde la alimentación, higiene hasta la actividad física son esenciales para evitar el desarrollo de enfermedades crónicas en nuestros hijos en edades tempranas.
Los hábitos son acciones que se repiten, por esta razón los padres deben contribuir en crear buenas costumbres desde el hogar.