Ejercitar la musculatura perineal debe hacerse todos los días, igual que controlar la respiración o contraer el abdomen
Su función
- Levantar y sostener la vejiga, uretra y útero.
- Resistir todas las presiones aplicadas al abdomen y la pelvis.
- Abrir y cerrar en los momentos adecuados para que pueda salir la orina, excrementos y aire.
- Colaborar con el resto de músculos de la columna para estabilizarla.
Muchas mujeres sufren incontinencia, un problema que aparece si la musculatura perineal es débil e inactiva.
Cuando se contrae la musculatura perineal, también se contrae la abdominal, trabajan a la vez, por eso es importante fomentar este trabajo en conjunto. Para que esta estructura anatómica funcione correctamente, sus músculos deben estar preparados para actuar tanto manteniendo un tono muscular basal como para reaccionar ante solicitaciones urgentes y rápidas, la disfunción del suelo pélvico podrá dar lugar a prolapso genital, incontinencia urinaria, incontinencia fecal y de gases, y alteraciones sexuales como la ausencia de orgasmo.
La rehabilitación perineal resulta especialmente compleja, la contracción del músculo de la zona perineal no es apreciable por la vista al ser éste un músculo interno, con lo cual el seguimiento y la detección precoz son difíciles. Sin embargo es muy importante para la salud de la mujer y para su calidad de vida sexual.
Existen métodos como son la electroestimulación vaginal, masoterapia y el fitness sexual con los ejercicios de Kegel que pueden mejorar o rehabilitar la musculatura perineal.
Electroestimulación Vaginal
Pretende inducir la contracción pasiva del esfínter uretral y la musculatura del periné a través de una corriente eléctrica que se aplica en la pared vaginal o anal.
Masoterapia.
El masaje de la musculatura perineal es una de las terapias más fáciles de aplicar y que menos rechazo produce, sobre todo cuando es aplicada por la pareja. Se deben tomar una serie de precauciones para evitar infecciones del tracto genital, especialmente durante el embarazo y el puerperio, aunque el masaje perineal se puede aplicar durante toda la vida de la mujer ya que además de ser una terapia facilitadora de la contracción es placentera y se puede llevar al ámbito de la intimidad sexual.
Fitness Sexual
Hay que tener en cuenta que la zona perineal es la de la sexualidad, una zona que provoca vergüenza en la mujer si debe ser manipulada.
Esta misma vergüenza es muchas veces la culpable de que la mujer no tenga integrado en su esquema corporal el periné: no lo ve ni lo toca, por lo tanto no existe. Por suerte, en las últimas generaciones van poco a poco, diluyéndose estos tabúes e insanas costumbres y cada vez es más frecuente la prevención que el tratamiento paliativo.
Para realizar los ejercicios hay que saber reconocer los músculos y saber contraerlos y relajarlos. Los ejercicios de Kegel fueron ideados por el Dr. Arnold Kegel para fortalecer los músculos del suelo pélvico.
Se utilizan dispositivos (conos vaginales, tubos de Pirex, bolas chinas, etc.) que la mujer intenta sostener con un aumento de peso progresivo, o los dedos de la misma mujer que introduce en la vagina haciendo apretamiento o contracción que le permite sentir la fuerza que aplica al dedo con sus músculos vaginales, este ejercicio todos los días 5 minutos las hará tener los músculos que causarían envidia a cualquier bailarina. Este método simple y económico devuelve esa sensibilidad perdida en el momento del coito, parte del entrenamiento es hacerlos 5 o 6 veces cada vez que lo recuerde en el día, al ver Tv, trabajando, manejando etc… pruébenlo y verán los resultados.
Con este ejercicio se tratan las disfunciones sexuales:
La disfunción sexual es el trastorno más reportado por mujeres con patología de suelo pélvico, ya que cuatro de cada cinco de ellas reportan anorgasmia, dolor y sequedad vaginal debida a falta de tono muscular, alteraciones anatómicas o incontinencia de esfínteres.
Afectando a la fase de excitación, es decir ausencia o disminución marcada de la lubricación vaginal y la vasocongestión genital, además la presencia del dolor durante o después del acto sexual como el espasmo involuntario de la musculatura perineal en el tercio inferior de la vagina, ante cualquier intento de penetración ya sea real, imaginario o anticipado. Además de la ausencia y alteración en la fase del orgasmo donde la mujer no llega al clímax.
El valor que tiene en sexología los ejercicios de Kegel es mejorar la sensibilidad vaginal en el momento de la penetración, al intentar contracciones voluntarias en penetración la sensación será más intensa para ambos miembros de la pareja, en el hombre será optimo el control de la eyaculación, en la mujer mejora la calidad orgásmica y en las mujeres que practican con frecuencia pueden lograr tener poliorgasmos así que a practicar para disfrutar más en el sexo.
Dra. Luz Jaimes M.
Médico Sexólogo
Presidente de la sociedad
venezolana de sexología médica
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