También conocida como lesión traumática cerebral mínima («Minimal Brain Traumatic Injury»).
Hay diferentes grados de lesiones cerebrales ocasionadas por trauma, como las que encontramos en la práctica deportiva. A veces los términos pueden resultar algo confusos para el público general, pero son útiles para que los profesionales de la salud podamos orientarnos y saber rápidamente la potencial severidad de la lesión, sus consecuencias y abordaje.
Me referiré, en este artículo, al que es -tal vez- el grado menos severo de trauma cerebral que se ve a menudo en el deporte: la concusión cerebral.
Por definición, la concusión cerebral no conlleva una lesión estructural en la materia cerebral, o sea que no se encuentra ruptura del tejido, sangrado o heridas, al menos no con las técnicas de imagen con que contamos hoy día. Es más bien una lesión funcional, o sea que vemos una alteración de la función, pero no una alteración de la anatomía del cerebro, a diferencia de la contusión cerebral, en la que sí vemos alteraciones del tejido como ruptura y sangrado.
Características
Han habido conferencias especialmente convocadas para tratar el tema de la concusión cerebral en el deporte, con los más renombrados expertos internacionales con experiencia en el tema, la última en Zurich en noviembre de 2008. Y si algo se ha sacado claro de estas conferencias es que el asunto no es claro. La definición misma de la concusión es compleja y comprende varios elementos. La definición actual es como sigue:
«La concusión es un proceso fisiopatológico complejo, inducido por fuerzas biomecánicas traumáticas y que puede incluir las siguientes características:»
Puede ser causada por trauma directo a la cabeza, cara o cuello, o trauma en otro sitio con fuerzas transmitidas a la cabeza.
Se ve un inicio que puede ser rápido de alteraciones de las funciones neurológicas que se resuelven de forma espontánea también rápidamente la mayoría de las veces.
Los síntomas clínicos son el reflejo de una alteración funcional más que de una lesión estructural (como dije no hay evidencia de daño anatómico a los tejidos).
Hay una serie de síntomas que NO NECESARIAMENTE INCLUYEN LA PÉRDIDA DE LA CONCIENCIA. Los síntomas irán desapareciendo con el transcurso de los días, pero a veces pueden durar varias semanas («Síndrome post-concusión»).
Síntomas
- Entre los síntomas que podemos encontrar están:
- Cefaleas o «presión en la cabeza».
- Mareos o pérdidas del balance y problemas de coordinación.
- Náuseas y vómitos.
- Alteraciones visuales («ver estrellas o luces», visión doble, otras).
- Tinnitus (timbres o zumbidos o campanas en los oídos).
- Sentirse «en el espacio» o «ido».
- Labilidad emocional (irritabilidad, llanto o risa inadecuados).
- Sensación de fatiga o «estar lentos»).
- También pueden verse alteraciones cognitivas (de las funciones mentales)
- Confusión, amnesia, retardo en contestar preguntas o seguir instrucciones.
- Pérdida de la conciencia (fugaz o prolongada).
Es complejo
En el pasado se propusieron muchas clasificaciones de la severidad de las concusiones, dependiendo de los «síntomas cardinales» como la pérdida de la conciencia, la cefalea, etc…y de acuerdo a la clasificación se determinaba el tratamiento. Pero recientemente se han abandonado estas recomendaciones, principalmente porque ahora sabemos que la condición es compleja y variable, cada paciente puede comportarse distinto y seguir un curso diferente. Por esta razón, cuando se sospecha una concusión, el paciente debe ser evaluado, decidir sobre el siguiente paso inmediato, continuar con las evaluaciones seriadas, tomar las decisiones de acuerdo a la evolución del paciente hasta que los síntomas desaparezcan, el paciente vuelva a su normalidad, pase cierto tiempo sin síntomas y pueda realizar ejercicios y actividades mentales sin recurrencia de los síntomas.
En el caso de los atletas
Al atleta no se le debe permitir volver a la actividad física hasta que se encuentre completa-mente libre de síntomas aún con ejercicios. Durante el período de vigilancia se mantendrá al paciente en completo reposo, incluyendo reposo físico y reposo mental para acelerar su total recuperación y evitar que los síntomas permanezcan por largo tiempo.
Una vez que el paciente esté asintomático iniciará un protocolo de rehabilitación progresivo que lo llevará al retorno gradual a sus actividades físicas y competencia. El paciente debe progresar paso a paso en el protocolo de rehabilitación mientras permanezca completamente asintomático con cada paso; si, en cualquier momento del proceso, los síntomas regresan, el paciente volverá al paso inmediatamente anterior y seguirá el proceso desde allí.
Como vemos, el diagnóstico de una concusión es un proceso complejo y su tratamiento lo es aún más. Hoy sabemos un poco más de este interesante proceso de alteración funcional del cerebro que tal vez sea un poco más común de lo que antes creíamos. Si usted o su hijo/a sufren un trauma, aunque sea pequeño, en su práctica deportiva y tiene algunos de los síntomas que he descrito, sobre todo si dura algo más que unos minutos, por favor consulte con su médico para asegurarse que siga los pasos más adecuados para su completa recuperación y evitar prolongar el sufrimiento de los síntomas enocontrados.